BARACUTEY CUBANO

El disidente cubano Guillermo Fariñas está dispuesto a deponer la huelga de hambre que mantiene hace 43 días, si el presidente Raúl Castro convoca a un referendo sobre el futuro de los presos políticos, propuesto el jueves por otros opositores.

“Por respeto y consideración hacia un grupo de hermanos opositores aceptamos esa propuesta, para demostrarle al mundo que la oposición cubana está dando alternativas”, afirmó Fariñas desde el hospital provincial de Santa Clara, al centro del país, donde fue internado el 11 de marzo.

Un grupo opositor propuso el jueves al presidente cubano, Raúl Castro, que convoque un referendo sobre la libertad de los presos políticos, como fórmula para que Fariñas levante la huelga de hambre y sed que mantiene desde hace mes y medio.

No obstante, Fariñas, quien realiza su ayuno para exigir la libertad de 26 reclusos políticos enfermos, dijo no tener “ninguna esperanza de que el gobierno acceda a celebrar el referendo”.

La plataforma La Agenda para la Transición anunció en rueda de prensa que envió una carta a Castro en la que sugiere que la consulta se haga en paralelo a las elecciones municipales que tendrán lugar el próximo día 25.

Los disidentes piden que los cubanos respondan en las urnas si quieren que todos los presos políticos sean puestos en libertad, que suman unos 200, según la oposición, o que sean liberados únicamente "los más enfermos, por razones humanitarias", o que todos sigan encarcelados.

"Contamos con la autoridad moral sobre Coco para asegurarle [a Castro] que si realiza lo que aquí hemos propuesto, él interrumpirá su actual protesta pacífica. Usted y su gobierno tienen la palabra", concluye la carta.

La Agenda para la Transición dice en la carta al presidente que no comparte su afirmación del domingo pasado de que Cuba padece una "descomunal campaña de descrédito" de Estados Unidos, Europa, la prensa internacional y la disidencia en torno a la situación de los derechos humanos en la isla.

"La única arremetida propagandística de este tipo es la que realizan algunos periodistas cubanos y un exiguo número de extranjeros al dar a esos valientes luchadores [los huelguistas] el título infamante de mercenarios", señala el grupo disidente, y dice que así el gobierno cae en el ridículo.

En la rueda de prensa y entre los firmantes estaba Félix Bonne Carcases, que ha prometido empezar una huelga de hambre si Fariñas muere y mantenerla también "hasta las últimas consecuencias".

Los portavoces de la Agenda para la Transición se mostraron pesimistas sobre la respuesta de Castro, argumentando que él nunca ha dado razones para albergar esperanzas.

Destacaron que Fariñas ni siquiera demanda la liberación de todos los opositores presos, sino sólo la "excarcelación", que se aplica por motivos de salud, sin extinción de la condena, de los que están más enfermos.

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Tomado de http://lacurradecuba.blogspot.com

ABSURDO REFERENDO. MÁS DE LO MISMO.

La situación en Cuba está ahora realmente crítica. El régimen se atrinchera y no sabe cómo actuar ante unas mujeres que, vestidas de blanco y con gladiolo en mano, salen a la calle sin miedo. Le tiran las turbas paramilitares, muchas de ellas sacadas de la Prisión de Mujeres de Occidente (Manto Negro). Presas comunes que no tienen bandera, y por unos simples cigarros, un "conduce" a su casa o, salir un rato a la calle, son capaces de ahorcar a sus mismísimas madres. De hecho muchas de ellas han cometido infanticidio, crímenes espantosos, uno más no importa.

Murió Orlando Zapata Tamayo ante la indiferencia internacional. Dios solo sabe cuánto tuvo que sufrir en ese largo camino de más de 80 días en un infierno interminable. En plena huelga de hambre fue golpeado brutalmente, prueba de ello es el pulover que su madre pudo recuperar, lleno de manchas de sangre. Tirado en el suelo húmedo y frío, pateado y sin tomar agua lo tuvieron por demasiado tiempo, el suficiente para que ya no tuviera salvación. Crueldad sin límites. Su madre ahora es golpeada también, vejada, amenazada, pero tampoco tiene miedo. El único que teme es ese régimen, oprobioso y sangriento.

Pero ahora sale un grupo de llamados disidentes, con Héctor Palacios a la cabeza, Francisco Chaviano, Gisela Delgado, entre otros ¿para qué? Pedir un referendo en elecciones dentro de la dictadura, donde los que cuentas los votos son los represores en ese circo llamado votación...¡Por Dios, qué es eso!

¿Dónde está la capacidad de pensamiento de alguien que se llame disidente y le pida a la misma tiranía un referendo? ¿Piensan que Castro es Pinochet?

¿Dónde éstá el sentido común? ¿Dónde está la razón de una lucha por la libertad de Cuba?

Vamos, un referendo en Cuba es una mueca social en un pueblo carente de información. ¿Dónde estaría la posibilidad de abogar por esos presos enfermos, en qué emisora radial, televisiva, en la prensa escrita?

¿Un referendo por 26 presos políticos o por toda Cuba? Entiendo que esos presos están en delicado estado de salud y merecen salir de esas inmundas celdas, pero, ¿a base de una jugada sucia?

Sé que dentro de ese grupo que pide el referendo hay algunos supuestos líderes que cabildean porque el dinero norteamericano se les mande a sus manos directamente, porque el Exilio prácticamente no exista, porque el control de la situación cubana esté de parte de traidores y/o agentes al servicio de la tiranía. A nadie engañan. Al menos a mí, no.

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ALGUNOS COMENTARIOS DEJADOS

Pedro Rholax said...

Es triste leer eso, pero es plenamente lógico. Cualquier reférendum estaría amañado, si no sazonado por hordas de gritones que esperan un TV de pamtalla plana o algo similar.

Salvo que Raul aceptase que la transparencia de dicho referéndum estuviese controlado internacionalmente, cosa que jamás aceptaría,y lo afirmo, ese hijo de la gran bretaña, cobarde y orgulloso como su hermano momificado.