Guillermo Ordoñez desde Cuba: El crimen de enviar a los cubanos a la guerra de Angola
El crimen de Angola
Por Guillermo Ordoñez
01 de Enero de 2014
Cuba actualidad, Centro Habana, La Habana, (PD) Si la reciente reflexión supuestamente escrita por el máximo líder de la revolución cubana se refiriera con lujo de detalles al costo humano de los hechos acaecidos en los campos de batalla africanos quizás este artículo no hubiese nacido nunca.
Lo escribo porque el autor de tal reflexión no se digna a comentar el altísimo costo en jóvenes vidas cubanas, sobre todo de descendientes de la raza negra, que tuvieron aquellas guerras.
Quiero refrescar la memoria de mis compatriotas, que no sufran del mal tan extendido del olvido, que recuerden cuantos hogares se llenaron de luto a cambio de recibir una medalla por un hijo muerto o desaparecido en las guerras africanas.
La guerra de Angola no fue una hazaña: fue un crimen.
Jóvenes militarmente inexpertos, recién salidos de las aulas escolares, fueron en su inmensa mayoría los cubanos que fueron enviados a Angola y Etiopía, sin saber bien a qué iban.
El objetivo era engrandecer el ego del Máximo Líder y reciprocar la ayuda que daba a su gobierno la Unión Soviética.
Pero, ¿era apreciada realmente esa ayuda por los soviéticos? ¿Acaso ignora Fidel Castro que ni siquiera los generales cubanos podían entrar a las bases soviéticas en Angola, de donde partía el asesoramiento militar?
¿No conoce Fidel Castro de las veces que los soldados angolanos se negaron a ayudar a las tropas cubanas a combatir contra las fuerzas de la UNITA porque decían que esa no era una lucha de ellos?
¿Por qué no se refirió a las decenas de jóvenes que regresaban enyesados a la patria, directo a la cárcel, por intentar desertar, por robo y por otras acciones que nada tenían que ver con "la justa causa de la lucha contra el colonialismo y el apartheid?
Cuando a principios de los años 70 en los Estados Unidos se debatía la injusta prisión de Ángela Davis, el gobierno cubano desplegó una grandísima campaña por su liberación, pero los cubanos no sabíamos apenas de la indebida y dura prisión que sufría desde hacía más de una década el gran ser humano que fue Nelson Mandela.
Los cubanos supimos de la existencia del apartheid, pero solo teníamos una vaga noción, porque en la prensa oficial no se hablaba mucho de eso, enfrascada como estaba en el odio al imperialismo yanqui, que era el enemigo del Máximo Líder y eso bastaba para que fuera nuestro enemigo también.
Sé que Fidel Castro considera que quien opine contrario a él está manipulado por el imperialismo yanqui, pero me siento capacitado para desde mi humilde y desventajosa posición, debatir respecto al tema de África, la tierra de mis antepasados.
Siento la desigualdad racial en mi país. No tengo necesidad de estudiar a profundidad el apartheid, que afortunadamente pasó a ser historia en Sudáfrica hace años.
Hoy se aspira un nuevo sueño. Dejemos las viejas historias. Miremos qué pasa en casa sin hurgar en el ojo ajeno.
Para Cuba actualidad: lizama1961@Gmail.com
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home