jueves, agosto 24, 2006

MARTHA BEATRIZ ROQUE: QUE CESE EL ACOSO O LA DEVUELVAN A PRISIÓN

Marta Beatriz Roque: que cese el acoso o la devuelvan a prisión

LA HABANA, 23(AP) - La activista Martha Beatriz Roque tiene una inusual petición para el gobierno de Cuba: que cese el acoso o la devuelva a prisión.

La ex prisionera política, que se ha opuesto a Fidel Castro durante 17 años, afirma que ya no puede soportar las amenazas e insultos interminables de los simpatizantes oficialistas que la denostan a gritos en la calle, deslizan mensajes amenazadores bajo su puerta y la semana pasada detonaron una pistola frente a su ventana a medianoche.

"Esta es una vida casi imposible", exclamó Roque, una de las disidentes más destacadas en Cuba. "Yo prefiero estar presa que tener que aguantar este constante hostigamiento", afirmó en declaraciones a The Associated Press el martes.

Roque, economista de profesión, era la única mujer entre las 75 personas encarceladas en el 2003 durante una masiva campaña del gobierno contra la disidencia. Fue sentenciada a 20 años de prisión. En julio del 2004, fue puesta en libertad bajo palabra por motivos de salud.

En mayo del 2005, Roque organizó una inusitada reunión con más de 200 disidentes para discutir la promoción de una democracia tipo occidental en Cuba.

Roque dijo que las presiones han ido en aumento desde que Castro fustigó a los adversarios en julio del 2005 en su discurso en la conmemoración anual de la revolución. Las agresiones han continuado después del 31 de julio, cuando Castro anunció que delegaba el poder a su hermano menor mientras se recuperaba en una cirugía gástrica.

Delgada, con pelo cano y 61 años de edad, Roque sufre de diabetes así como de problemas del corazón y la presión arterial. "¿Hacen eso para que me dé un infarto?", preguntó medio en broma, medio en serio.

Lo peor ocurrió en abril, dijo, cuando fue empujada y abofeteada por un hombre y una mujer que irrumpieron en su apartamento. Ese mes, un grupo de cubanos que se mudó recientemente cerca de su edificio pasó un fin de semana pintando la bandera cubana y enconados lemas en el pasillo que da a su vivienda.

En un muro todavía se leen los mensajes de "Viva Fidel" y "Abajo los Contrarrevolucionarios". Y cada vez que Roque abre su puerta, se topa con un enorme retrato de Castro que fue colocado por los simpatizantes oficialistas.

"Esto ha sido una ofensiva que no ha parado", manifestó la disidente.

Roque sospecha que entre sus vecinos hay agentes de la seguridad del estado.

"Que me tengan en una celda de la prisión, donde nadie se meta conmigo", expresó Roque, quien en mayo envió cartas a los ministerios de justicia y del interior de la isla para pedir al gobierno que cese los actos agresivos de los agentes o la vuelvan a encarcelar. "Estoy dispuesta a hacer este sacrificio, para mostrar al mundo que en Cuba no se puede vivir", señaló.

A principios de este mes, el Ministerio de Justicia le dijo que el asunto no correspondía a su jurisdicción y que debía comunicarse con la oficina del procurador general. Roque sopesa entre hacer eso o iniciar una protesta en la Plaza de la Revolución de La Habana.

Cuando fue liberada en julio del 2004, Roque denunció que en su celda había muchos insectos, ratas y un mero hoyo en el piso como excusado. Ahora afirma que esas incomodidades palidecen ante su actual sufrimiento.

"Mejor que esto, cualquier cosa _ hasta la tumba", dijo.

Roque es uno de los varios disidentes que se han quejado de asedio físico y psicológico por vecinos y presuntos agentes.

La disidente dice que no sabe si las cosas para los activistas vayan a mejorar o empeorar bajo el liderazgo del hermano menor de Castro, el ministro de Defensa Raúl Castro.

Pero consideró que es inminente un eventual cambio político y económico en Cuba.

"Raúl Castro no se va a mantener en esto por mucho tiempo _ de eso, estoy segura", dijo Roque.