BARACUTEY CUBANO

Por Roberto Jimenez

Ayer caminaba con mi esposa entre las cruces por el campo del Memorial Cubano...

Las ráfagas de viento frío que me halaban -- comprometiendo el precario equilibrio de mis pasos sobre el terreno irregular salpicado de escasa hierba pertinaz--, rompían muchas de esas cruces y las hacían volar en pedazos, como pétalos que quisieran expandir su flor mas allá de la prisión del tallo...

Veía pasar aquellos mensajeros de nuestra tragedia y los comprendía... En algún momento comprendí y me lo guardé dentro de mí...

Eran nuestras solidarias mariposas que aleteban en mi entorno... La tragedia de nuestro pueblo es inasible...

Seguí caminando entonces con mi frente lo más en alto posible, cuidando que mis pasos no fallaran, mi esposa siempre alerta...

Nuestro compromiso es inasible, para muchos incomprensible... pero está bien afincado en cada uno de nosotros...

Nuestra verdad debe volar hacia todos los confines... De nosotros depende...

Todo mi reconocimiento a quienes con tantísimo esfuerzo pueblan año por año con nuestras dolorosas cruces el campo del Memorial Cubano en Miami y hacen posible que esa imagen impactante sea vista por el mundo.

Aunque tántos sigan volviendo el rostro...

Roberto Jiménez
penhadecuba

http://www.memorialcubano.org/
Fonte: Identificada en el texto
http://www.cubalibredigital.com