miércoles, noviembre 21, 2007

¿ POR QUÉ NO TE CALLAS ?

¿Por qué no te callas?


Diario Las Americas
Publicado el 11-20-2007

Por Ernesto F. Betancourt

Esa fue la pregunta, o más bien sugerencia, del Rey de España, Juan Carlos, que dejó muy molesto a Hugo Chávez en la sesión de cierre de la última Cumbre. La frase ha pegado tremendamente en España. Inclusive ha servido de estribillo para una canción que ha pasado al primer lugar en el Hit Parade español. Mientras, Hugo, que está acostumbrado a que le aguanten sus vulgaridades porque si no corta los petrodólares, está rumiando cómo vengarse de la humillación de que lo mandaran a callar.

Para mí, quien quedó muy mal fue Michele Bachelet. Como presidenta del país anfitrión de la Cumbre, ella presidía la sesión y fue ella la que le dijo a los oradores que cada país tenía tres minutos para hablar. Chávez se tomó 25 minutos y la Bachelet no tuvo la firmeza de pararlo, lo que debió haber hecho como presidenta de la sesión. Después, cuando Rodríguez Zapatero tomó la palabra, Chávez empezó a interrumpirlo. Se ve que al Rey se le subió lo de gallego que lleva en las venas y decidió hacerle el pedido al locuaz charlatán venezolano, quien ahora, amenaza con represalias contra los inversores españoles en Venezuela, en particular los bancos.

Su padre, el Charlatán en Jefe, no se pudo aguantar y salió en defensa de Chávez en una de sus reflexiones. Esto confirma, desde mi perspectiva, que las declaraciones de Felipe Pérez Roque en la ONU de que Cuba estaba dispuesta a renunciar a su soberanía y bandera en aras de una integración con Venezuela, bajo el manto del ALBA, fueron hechas con la plena aprobación de Fidel. ¡Qué vergüenza! Estos traidores creen que pueden renunciar a la soberanía y la bandera para seguir disfrutando del poder con el financiamiento de los petrodólares venezolanos.

O sea, lo del antiamericanismo, ha sido solamente un tema más de la mitología fidelista. El hijo de Angel Castro, el soldado de Valeriano Weyler, no tiene el más mínimo amor por Cuba. Para Fidel, Cuba ha sido, y es, sólo el pedestal para su gloria personal. Es interesante que los españoles que, tanto bajo Aznar como bajo Rodríguez Zapatero, han explotado a los trabajadores cubanos en las industrias mixtas, en especial los hoteles, descubran ahora que Fidel, y su hijo adoptivo Chávez, los resienten y odian tanto, si no más, que a los americanos.

La diferencia está en que el cubano de a pié, cuyos sentimientos nacionalistas han sido explotados hasta el infinito con la demagogia antiamericana, dudo apoye la renuncia de la soberanía y la bandera que con tanta ligereza mencionó el cretino de Pérez Roque. Para los talibanes, como él y Lage, esta fórmula les garantiza una base de financiación de Chávez para seguir explotando al pueblo de Cuba cuando muera Fidel. Y para Fidel, la verborrea del “burdos, prepotentes e ignorantes”, como lo describiera Carlos Fuentes, teniente coronel venezolano con el Socialismo del Siglo XXI, le ofrece tener vigencia más allá de su muerte. Por eso es dudoso que en Cuba haya cambios medulares.

Pero todo este andamiaje se vendrá abajo. Claro que Lula en Brasil, Michele en Chile, Danielito en Nicaragua, Cristina en Argentina y Evo en Bolivia, para mencionar a los más evidentes, apoyarán a Chávez. Pero Uribe en Colombia y Rafael Correa en Ecuador ya han dado indicaciones de que no van a apoyar a Chávez. Además, el pueblo venezolano está plenamente consciente del fracaso rotundo del régimen castrista y las encuestas revelan que un alto porcentaje rechaza la extensión del modelo cubano a su país.

En conclusión. Este incidente revela hacia dónde se encamina el régimen en la actualidad. La idea de que las cosas van a cambiar es una ilusión. Igual es lo del tránsito pacífico. Esta gente no suelta el poder a las buenas. Habrá que sacarlos con mucha violencia o tal vez cuando el aparato represivo se convenza de que han perdido el apoyo popular y el grado de represión requerido para continuar haciendo lo que les dé la gana excederá lo que el aparato represivo está dispuesto a hacer.

Fonte: Identificada en el texto
http://www.cubalibredigital.com