CARDENAL ORTEGA ALAMINO CALIFICA DE "PASO PROMETEDOR QUE HA CREADO EXPECTATIVAS NECESIDAD DE CAMBIOS ENUNCIADOS POR LAS MAS ALTA AUTORIDADES"
La Habana
Ansa
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Fidel Nuñez
Analista
Jefe de Buró
Latinoamérica
Dept. de Investigaciones
La Nueva Cuba
Enero 3, 2008
El cardenal cubano Jaime Ortega Alamino, arzobispo de La Habana, calificó de "paso prometedor que ha creado expectativas" la "necesidad de cambios" en Cuba "enunciados por las más altas autoridades" del país en 2007.
El prelado subrayó que el año pasado "en todos los niveles de la nación cubana" se expuso "un cúmulo de críticas, quejas y propuestas esperanzadoras basadas en la necesidad de cambios, aún estructurales, en la organización y desarrollo de la vida nacional".
Ortega Alamino lo afirmó en una homilía dedicada a la celebración católica del 1 de enero, Jornada Mundial de la Paz, durante una misa que ofició en la Catedral de La Habana, que estaba colmada de feligreses.
( foto de archivo )
Las autoridades cubanas "han pedido una opinión amplia sobre todos los temas preocupantes" en la sociedad, dijo. "Esto ha sido un paso prometedor", agregó.
Recordó además que en su mensaje de Navidad de diciembre "los obispos cubanos nos referíamos a las decisiones que debían responder a las inquietudes expresadas y que son esperadas con cierta ansiedad por nuestro pueblo".
Agregó que la Iglesia Católica "ofrecía" en ese mensaje "sus oraciones y su cooperación en esa obra común", y se preguntó "¿cómo pueden cooperar la Iglesia y los cristianos que la integran en este tipo de acción social y política?". El cardenal Ortega citó al Papa Benedicto XVI que se refirió en su mensaje de nuevo año también a la familia como comunidad de paz. Tomando ese concepto dijo con respecto a Cuba que, tal como ha manifestado el pontífice, "entre cubanos es posible la tolerancia, la convivencia armoniosa y la reconciliación cuando esta es necesaria". "No se reconcilian ideas ni posturas que pueden ser irreconciliables, sino personas", advirtió.
Sobre la familia en Cuba mencionó "la posibilidad" de aprobación de leyes que permitan "un falsamente llamado matrimonio" entre personas del mismo sexo", las "uniones consensuales", la "reducción alarmante de la natalidad" y la "emigración numerosa de jóvenes" como signos de "debilitamiento" del orden familiar.
Como "algunos elementos positivos" en favor de la familia en Cuba mencionó "artículos periodísticos, mensajes televisivos de auténtica belleza, que exaltan los valores familiares como la "convivencia armoniosa entre esposos, el trato adecuado a los niños y la atención delicada a los adultos mayores".
El cardenal abogó, en términos generales, y en referencia a su país por "una unidad nacional que no es uniformidad, pero que participa de esa capacidad fraternal que hay en una familia para acercarse sus miembros unos a otros".
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Empieza en Cuba un año de incógnitas
La revolución entró ayer en su año número 50 con retos y sin saber el papel que jugará Fidel Castro
Servicios de La Opinión
02 de enero de 2008
LA HABANA.— La revolución cubana comenzó este martes la cuenta atrás hacia su medio siglo en medio del proceso electoral para renovar sus órganos de poder, la tarea de responder a problemas económicos reiteradamente denunciados y la incógnita del futuro político del líder cubano, Fidel Castro.
El mandatario, quien ayer cumplió 49 años en el poder y se convirtió en el gobernante que más tiempo lo ha ostentado en Occidente si se excluyen reyes y príncipes, según destacaron los analistas, envió ayer un mensaje a la nación en el que calificó de "resistencia heroica" su mandato de medio siglo en la isla.
Sin embargo, como señaló el presidente provisional, Raúl Castro, el pasado 28 de diciembre, los problemas no son pocos. "¡A trabajar duro!", fue el saludo con que Raúl culminó su discurso ante el Parlamento, tras un año de continuismo y sin grandes cambios que alivien el deterioro y la crisis de la economía isleña.
El 17 de diciembre Fidel Castro dijo que no se quiere aferrar a cargos y el día 28 admitió que sí lo hizo en el pasado.
Algunos analistas coinciden en que Fidel Castro podría aceptar conservar para sí el cargo de Primer Secretario del Partido, responsabilidad más importante que la de Presidente del Consejo de Estado, según reza en la actual Constitución del país, y dejar que su hermano sea designado al frente del Estado y Carlos Lage como presidente del Consejo de Ministros.
Raúl Castro se quejó en diciembre pasado del "exceso de prohibiciones y medidas legales" y la necesidad de que la tierra esté "en manos" de quienes puedan producir con eficiencia como dos de los elementos que las autoridades tendrán como referencia durante los próximos meses.
Observadores comentaron que las palabras de Raúl Castro sugieren la posibilidad de que las improductivas granjas estatales sean desmanteladas y las tierras sean redistribuidas entre cooperativas de campesinos, o incluso de forma individual, como se ha hecho en Vietnam, una país "hermano", como lo califica el gobierno de Castro.
Con ese escenario, los próximos 366 días presentan una intensa agenda política con el próximo 20 de enero, día de los comicios a diputados nacionales y provinciales, como primera fecha de referencia.
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