lunes, julio 05, 2010

Artículo de Robert A. Solera sobre la Carta de los 74 al Congreso de los EE.UU. sobre el proyecto de ley H.R. 6446

‘NI QUITO NI PONGO REY…”


Por Robert A. Solera
Editor de Cubaenelmundo.com
julio 5, 2010


“Ni quito ni pongo Rey, pero ayudo a mi señor”, famosa frase pronunciada por el francés Bertrand Du Guesclin, en la guerra civil que enfrentó a Pedro I “el Cruel” (el Justiciero, para Felipe II) y su hermano bastardo Enrique de Trastamara. Ambos se enfrentaron en un combate mortal. Pedro iba triunfando y su hermano estaba en el suelo, debajo de él, cuando intervino Bertrand, contra todas las reglas de caballería y morales, y pronunciando esta frase, dio la vuelta a los contendientes, de forma que Enrique acabó, por su propia mano, con la vida de su hermanastro, convirtiéndose en rey, rama bastarda de la que descienden los monarcas castellanos (y españoles) posteriores. No hay que olvidar que Bertrand y sus "Compañías Blancas" eran prácticamente unos mercenarios".

Algunos cubanos –unos cientos—se dirigieron al Congreso de los EEUU pidiéndole que no levantara algunas prohibiciones en vigor que impiden gastar –-no viajar como erróneamente se dice— en algún periplo a Cuba, asi como la autorización para vender productos subsidiados -–a la larga—con las finanzas de los ciudadanos de este país.

Nosotros, los cubanos, nos saltamos las barreras nacionales…cuando nos conviene. Y luego nos quejamos de que entre nosotros hay ¡Plattistas, que miran al Norte, revuelto y brutal!.

Si yo quisiera, y como yo millones de ciudadanos americanos, tendría el derecho por mi nacionalidad adquirida de hacer lo propio, pero no es asi para los cubanos firmantes, que le piden a un país extranjero que tome medidas que consideramos justas aunque totalmente fuera de nuestros fueros de ciudadanos cubanos.

Acusamos a los EEUU de que intervienen en nuestros asuntos políticos internos y luego les pedimos que lo hagan. Ese es un mal endémico. No sólo lo hacen los cubanos que habitan en Cuba sino muchos de los que habitan en el Exilio.

Miramos al Norte para resolver nuestros “problemas” y luego nos quejamos de interferencias.



No se me malinterprete, por un lado apoyo el derecho inalienable de cualquier ser humano a trasladarse a donde le venga en ganas…¡hasta al Infierno!. Por otro lado, no apoyo que el desgobierno cubano se nutra de los dólares americanos con una mano y con la otra la utilice para golpear a los mismos que lo nutren…Pero, hay un gran pero…Ya alimentamos al gobierno cubano con la justificación que es para “ayudar” a nuestros parientes. Por igual, reconozco el derecho de los que habitan a este lado de la Florida a “tirar” sus dólares al “hueco negro” cubano pues a la larga los dólares van a las arcas del gobierno cubano, que expolia a los viajeros y a los remitentes de “ayuda” familiar, en más de mil y una forma…todas las que sus “cabecitas delirantes y truhanescas” les permitan hacerlo.

Nos gusta “eat the cake and keep it, too”. No es posible jugar con dos barajas y darse golpes de pecho como puros y blancos lirios limpios de toda mancha. O tomamos un camino o tomamos el otro.

Al igual que Duguesclin nos disculpamos diciendo que “ni quito ni pongo Rey…” , pero eso no se lo creen ni en Pogolotti. “Semos o no semos”. (sic)

"Liberty is something you can enjoy only if you fight for it"