sábado, diciembre 10, 2016

Fidel Castro: ¿revolucionario o tirano demagogo?

Tomado de http://www.diariodecuba.com


Castro: ¿revolucionario o tirano demagogo?


 Huber Matos  y Fidel Castro en los primeros días de enero de 1959

Por Carl Gershman
Washington
8 de Diciembre de 2016

Fidel Castro fue un tirano que tuvo éxito en convencer a mucha gente en el mundo democrático de que en realidad él era lo opuesto. El primer ministro de Canadá lo llamó un "revolucionario legendario", mientras que el presidente de Irlanda lo consideró "un gigante entre los líderes globales, cuya visión no era solo la de la libertad para su pueblo sino para todos los pueblos oprimidos y excluidos del planeta".

Castro pudo engañar a tanta gente porque era un hábil demagogo que sabía cómo manipular las emociones y los prejuicios políticos para asegurar su poder y magnificar su imagen pública. Cómo fue capaz de hacerlo, y por qué los países democráticos produjeron tantos "tontos útiles", que es como Lenin describió a los apologistas occidentales del comunismo, son preguntas que se han tratado en otras partes. No es mi intención responder a las mentiras y la propaganda sobre Castro; sería un ejercicio infructuoso que solo dignificaría ideas que no merecen ser tomadas seriamente. Más que centrarme en Castro, recordaré aquí a quienes resistieron heroicamente su demagogia y su violenta brutalidad, y dejaré que las historias de estas personas eluciden el ignominioso legado de Castro.

Pedro Luis Boitel

Quiero hablar de cuatro héroes cubanos. El primero es Pedro Luis Boitel, considerado la figura emblemática del movimiento pro-democracia cubano. Boitel fue activo en los años 50 contra la dictadura de Batista hasta su exilio forzoso en Venezuela, donde estableció una estación de radio que transmitía mensajes anti-Batista hacia Cuba. Regresó a la Isla tras la revolución y fue candidato a la presidencia del Centro de Estudiantes por el Movimiento 26 de Julio, de Castro. Pero Castro apoyaba a un candidato rival, ya viendo a Boitel como una potencial amenaza porque era carismático, opositor al comunismo, y tenía mucho apoyo del movimiento obrero. Cuando las intenciones totalitarias de Castro se hicieron claras, Boitel fundó el Movimiento para Recuperar la Revolución. Al poco tiempo fue arrestado y condenado a 10 años de prisión.

Fue en las prisiones de Castro que Boitel pasó por una profunda transformación espiritual. Reunía a los presos en torno a una filosofía de resistencia no violenta al régimen, una que no aceptaba ningún tipo de negociación con sus carceleros. Fue el primero de los [presos] Plantados, y sufrió los peores castigos. Boitel comenzó una serie de huelgas de hambre y otras protestas como forma de defender su dignidad y la de sus compañeros de presidio. El régimen lo mantuvo en prisión más allá de sus 10 años de sentencia, y el 3 de abril de 1972 comenzó una última huelga de hambre para protestar por la prolongación de su presidio y otras injusticias. Según sus compañeros, cuando Boitel murió, 53 días más tarde, no fue por la huelga, sino porque un guardia de seguridad lo asfixió con una almohada.

Por su liderazgo moral y resistencia intransigente al régimen, y no menos por la persistencia de su madre en hacer que su caso se conociera en todo el mundo, Boitel se convirtió en un ícono de la lucha anticastrista. Si bien fue enterrado en una tumba sin nombre, su leyenda vivió por el boca a boca en las calles de Cuba y especialmente en las prisiones. Los activistas prodemocráticos pronto encontraron su tumba y ahora todos los años hay un enfrentamiento con la policía cuando estos activistas peregrinan hasta su sepulcro para recordarlo a él y a su lucha. Hoy, más de un grupo opositor a la dictadura lleva el nombre de Boitel.

Huber Matos

Huber Matos fue otro héroe que se opuso a Batista. Pero a diferencia de Boitel, era un líder en la lucha armada de Castro que derribó a la dictadura precedente. Matos es conocido por haber llevado cinco toneladas de armas a los rebeles, por liderar el asalto sobre Santiago de Cuba, y por ingresar en La Habana en un tanque junto a Castro y otros revolucionarios en el desfile victorioso en enero de 1959. Castro lo nombró Comandante del Ejército en la provincia de Camagüey.

Al igual que Boitel, Matos fue apartado tras los primeros movimientos castristas para imponer un sistema totalitario, incluyendo la ejecución en manos de pelotones de fusilamiento de cientos de prisioneros de fortaleza La Cabaña y el establecimiento del primer campo de trabajo forzado de Cuba —Guanahacabibes–, que se convirtió en el lugar para enviar disidentes, homosexuales, testigos de Jehová y pastores afrocubanos, una represión documentada por el cineasta Néstor Almendros en su emocionante película Conducta impropia). Renunció a su puesto el 19 de octubre y fue inmediatamente arrestado, junto a cinco capitanes y 11 tenientes que protestaron por su arresto.

En el juicio subsiguiente, Castro dio una arenga de siete horas, acusando a Matos de hacer una campaña contra la revolución y promover los intereses de Estados Unidos, los grandes terratenientes y los partidarios de Batista. Matos fue sentenciado a 20 años de prisión, 16 de los cuales los pasó en una celda de confinamiento solitario. Fue torturado, realizó huelgas de hambre y muchas veces se le dijo que no saldría vivo de allí.

Pero fue liberado en 1979, en parte debido a un pedido firmado por 100 prominentes estadounidenses entre los cuales estaban los senadores Henry "Scoop" Jackson y Daniel Patrick Moynihan, el premio Nobel Saul Bellow, el presidente de la Federación de Organizaciones Laborales (AFL-CIO) Lane Kirkland, el líder de los derechos civiles Bayard Rustin e intelectuales como Jeane Kirkpatrick, Arthur Schlesinger y Sidney Hook.

En una conferencia de prensa en Nueva York semanas después de su liberación, Matos emitió un fuerte comunicado sosteniendo que creía que la lucha cubana por la libertad tendría éxito. "La lucha contra el régimen será larga", dijo. "De eso no tenemos ilusiones. Pero tendrá éxito por el compromiso de su pueblo con los valores democráticos básicos. No apoyamos el terrorismo o la invasión desde el exterior. No queremos una dictadura de derecha que reemplace al régimen represivo que tenemos ahora. Pero vamos a ganar". Llamó a una "lucha ideológica contra Castro… para explicar la dura verdad de su Gobierno: que su régimen viola todas las normas de libertad y bienestar humanos y es despreciado por la enorme mayoría del pueblo cubano". Al año siguiente, en Caracas, Matos estableció la organización Cuba Independiente y Democrática (CID) para llevar adelante esta lucha. La CID continúa activa a través de sus esfuerzos por apoyar el desarrollo de la sociedad civil en la Isla. Matos murió en el exilio, en Miami, en 2014.

Laura Pollán

El tercer caso es el de la heroína Laura Pollán, fundadora de las Damas de Blanco. Pollán era una mujer simple –madre, esposa y maestra. Amaba la literatura. No era política, al menos hasta que su esposo, Héctor Maseda Gutiérrez, fue arrestado junto a otros 74 disidentes en la Primavera Negra de 2003. Desde el momento en que fue detenido, Pollán tuvo una misión: liberar a su esposo y convocar a otras mujeres cuyos seres queridos también habían sido detenidos. Con ese fin creó las Damas de Blanco. Marchaban todas las semanas desde la habanera Iglesia de Santa Rita, vestidas de blanco y con gladiolos. Su ropa simbolizaba la pureza de sus motivos y las flores su integridad y fortaleza moral. Cuando gritaban "libertad", lo hacían no solo por sus maridos y padres, hijos y hermanos, sino por toda Cuba.

El régimen reaccionó a estas marchas pacíficas con violencia y veneno. Las mujeres eran insultadas, llamadas traidoras y mercenarias, y atacadas por brigadas de respuesta rápida. Pero persistieron, y en la medida que lo hacían su reputación y autoridad moral fue creciendo en Cuba y en todo el mundo.

Luego, el 24 de septiembre de 2011, cuando las mujeres eran empujadas y golpeadas por estas turbas, Laura fue personalmente atacada por un agente de la Seguridad del Estado. Cayó en una condición crítica ocho días después. Murió el 14 de octubre, mártir de la causa por la libertad.

¿Fue Laura asesinada? Su sucesora, Berta Soler, cree que sí. Me lo dijo ella misma a comienzos de este año. Y también lo cree el músico cubano Amaury Gutiérrez, cuyo hermoso himno en memoria de Laura Pollán incluye estas poderosas líneas:

La maldad de tu verdugo te hizo eterna y la patria te agradece y te venera…
hoy el mundo está mirando y los cómplices callados se avergüenzan…
te quisieron silenciar y hoy tu voz suena más alto…
Dictadores asesinos de mujeres, la justicia no ha llegado pero viene
Son más de cincuenta años
Pero seguimos luchando
Laura, mujer valiente

Mientras la gente a lo largo de Cuba lloraba la muerte de Laura Pollán, el Gobierno respondía con "infinito rencor ideológico", en palabras de Yoani Sánchez. "Laura se fue —continuaba Sánchez— y ahora todos los actos de odio que hicieron contra ella resuenan más grotescos. Laura se fue y nos dejó un país desperezándose de un totalitarismo vetusto que no sabe decir siquiera lo siento".

Oswaldo Payá


El último héroe es Oswaldo Payá. Payá fue un activista católico, fundador del Movimiento Cristiano Liberación (MCL) en 1988, más conocido por liderar el Proyecto Varela, una petición lanzada en 2002 pidiendo elecciones libres y otros derechos. El proyecto enfureció al Gobierno cubano, que respondió forzando una reforma constitucional a través de la Asamblea Nacional para que el sistema comunista en Cuba fuera "irrevocable". A esto lo siguió la Primavera Negra, cuando 75 de los más prominentes activistas cubanos fueron arrestados.

El régimen no arrestó a Payá por su reconocimiento internacional. El Parlamento Europeo le había entregado el Premio Sajarov en 2002 y ese mismo año fue nominado para el Premio Nobel de la Paz por cientos de parlamentarios en una campaña liderada por su amigo, el presidente checo Václav Havel. A diferencia de la birmana Aung San Suu Kyi y de Liu Xiaobo de China, por quien también hizo campaña Havel, Payá nunca recibió el Nobel. Pero fue un activista del mismo molde —comprometido con la no violencia y la reconciliación y un líder de estatura moral.

Al igual que Laura Pollán, Payá murió en circunstancias misteriosas. El 22 de julio de 2012 fue asesinado en un accidente automovilístico cuando viajaba en un auto alquilado con tres democristianos —dos de ellos de Europa— para reunirse con miembros del MCL en el oriente de la Isla. El régimen sentenció al conductor español, Ángel Carromero, a cuatro años de prisión por homicidio vehicular. Pero luego de que el Gobierno español negoció su liberación, Carromero dio una entrevista a The Washington Post en la que afirmó que su auto fue embestido por un vehículo con placas estatales. Ocho senadores de EEUU pidieron una investigación sobre el choque a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, sosteniendo que el relato de Carromero suscitó "cuestiones muy preocupantes respecto a que el auto de Payá fue deliberadamente impactado por funcionarios gubernamentales cubanos bien conocidos" por su acoso al disidente. Hasta el momento, el Gobierno cubano se niega a cooperar en dicha investigación.

La actualidad de la lucha por la democracia


Las historias de estos cuatro héroes hablan de un régimen de extrema inhumanidad e hipocresía. Quienes desafían su poder corren el riesgo de pagar el mayor precio, y muchos lo han hecho. Es en este contexto que el opositor Manuel Cuesta Morúa recibió recientemente el Ion Ratiu Democracy Award, del Woodrow Wilson Center.

Conozco a Manuel Cuesta Morúa desde hace ya varios años y sé que pertenece a la tradición de los héroes cubanos que han buscado el camino no violento de la transición democrática y la reconciliación.

La visión estratégica de Morúa está formada por un espíritu de unidad democrática y guiada por principios fundamentales:
  •     Que las coaliciones opositoras existentes deben encontrar el camino de trabajar juntas, incluso manteniendo identidades separadas;
  •     Que es importante recibir y apoyar diferentes estrategias para promover la democracia, porque uno nunca sabe qué generará el cambio y todos pueden hacer su parte en la lucha por la democratización;
  •     Que los demócratas cubanos no deben aislarse a sí mismos de la comunidad internacional, sino que deben intentar construir lazos de diálogo y cooperación;
  •     Que es importante observar las políticas de lo que es posible, que es la mejor manera de ir hacia la política de lo deseable, y que al tiempo que se reconoce la inevitabilidad del gradualismo no se obvia la necesidad de la movilización y la resistencia para llevar adelante la lucha; y por último,
  •     Que apoyar iniciativas que surgen dentro de Cuba es la mejor manera de tomar un contacto cercano con el pueblo cubano.
El pueblo cubano tiene una profunda necesidad de solidaridad internacional del mundo exterior, que ha sido parcial debida a las mentiras y malas intenciones engendradas por el castrismo. Pero su liberación debe venir desde adentro, al igual que el esfuerzo por encontrar un equilibrio entre reconciliación y convivencia con la verdad del pasado de casi seis décadas.

Ahora que las relaciones entre Cuba y Estados Unidos se han normalizado, resulta urgentemente importante que las relaciones se normalicen entre el pueblo cubano y su Gobierno. Muchos han sufrido y muerto por lograr ese objetivo llamado democracia, y existe un creciente número de cubanos que comparten esta visión. Si se mantienen unidos, el futuro es de ellos.

Carl Gershman es presidente de la National Endowment for Democracy. Este artículo, publicado originalmente en inglés en World Affairs Journal, es una adaptación de las palabras dirigidas el 5 de diciembre de 2016 en la presentación del Ion Ratiu Democracy Award del Woodrow Wilson Center al líder demócrata cubano Manuel Cuesta Morúa.

Traducción: Hernán Alberro.
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CUESTA MORÚA: LA TOUR DISIDENCIA CONSTRUYENDO EL SOCIALISMO

Por Dr. Santiago Cárdenas
Especial para Nuevo Acción
23 de agosto de 2016

La tour disidencia es la variante más visible  (y la más provechosa para  los  vivarachos) de la oposición leal.  En palabras más simples: es la oposición que convive en gracia con los comunistas. Se bañan en el Almendares  y guardan la ropa en el río  Miami sin  problemas… en estos últimos días del castrato.

Lo de “leal” le ha dado la vuelta al planeta  y al mundo de la cubanología. El término saltó, por lo insólito y obsequioso, desde las computadoras  de dos  laicos  amigos de su  Eminencia  Le  Cardinale a las  páginas de los periódicos urbi et orbi. Payá los llamó  comisarios y  definió la mojiganga  con sólo dos palabras: cambio-fraude. Así de sencillo. Así de fácil.  Que no hace falta tanta  “academia” para  definir lo evidente.

Pero Cuesta Morúa (Foto grande que encabeza este artículo),  un socialista afrodescendiente, no quiere o no le conviene entender lo dicho en los párrafos  precedentes. Allá está (o – a la inversa — aquí está; dando algunos  viajes a la isla) para demostrarnos  que en  Cuba se puede ser socialista y democrático. Que me perdone  Don Manuel, estos términos son incompatibles; mutuamente   excluíbles.

La estrategia de Cuesta M.  desde su exilio dorado es semejante  a la de Raúl: perfeccionar el socialismo cubano. Para ésto fundó una  “corriente  socialista” y un  arco “democrático” De nuevo: permítame que me sonría. No se puede ser socialista y demócrata al unísono.

(Manuel Cuesta Morúa)

Curtois evaluó en unos cien millones las víctimas del socialismo desde Lenin. Como filosofía contra natura los socialismos hay que imponerlos por la fuerza, a la cañona,  como bien sabemos los cubanos. Hay que  “construirlo”, y por consiguiente necesita de ideólogos y “arquitectos” sociales.  Es eso lo que están  proponiendo  Raúl  y Manuel –con diferentes variantes—para el sufrido pueblo cubano asqueado de tanta manipulación. El primero desde el gobierno  dictatorial; Morúa desde la tour disi-oposición. Dizque oposición.

Las mesas de “unidad”,  la   progresía, los socialismos, el viajeteo y los cambios-fraudes se definen por sí mismos. Tienen un denominador común: poco a  poco; sin pausa, pero sin prisa. Como orienta la alta inteligencia cubana y el monopartido.

Lo que necesitamos en Cuba—y urgentemente–es un baño de inmersión  en el capitalismo y no remiendos con  un nuevo socialismo. Además, unas elecciones libres para pasarlos  por las urnas; que no por las armas.

Don Manuel no va a perfeccionar el socialismo en la isla  desde la billetera, perdón  desde la sagüesera, de su  golden exile  in Miami.
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Nota del Bloguista de Baracutey Cubano
 
En el artículo el belga  nombrado Dirk van der Brocke realmente se llama Dirk Van den Broeck. A continuación  una foto durante  una actividad patriótica en Madrid en octubre de 2005 donde aparece este bloguista de Baracutey Cubano  hablando, durante el almuerzo ofrecido,  con el mencionado Dirk Van den Broeck; al frente nuestro  el periodista, escritor y productor de documentales históricos Pedro Corzo, presidente ejecutivo del  Instituto de la Memoria Histórica Cubana contra el Totalitarismo.



He tenido conocimiento  que en los primeros meses del año (2015) y después de supuestamente  conocer  de manera palmaria el mal manejo de los fondos de la organización por parte de Manuel Cuesta Morúa,   algunas personas se separaron de la organización Arco Progresista, organización dirigida por éste.  También se me ha dicho que la Dama de Blanco Lilian Castañer fue  ¿a la Universidad Internacional de la Florida, FIU,?  a una actividad en la que participaba Manuel Cuesta Morúa y públicamente  le reclamó a Cuesta Morúa por la supuesta estafa cometida en la compra del apartamento del Vedado.
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Manuel Cuesta Morua ¿El líder que necesita la oposición cubana? Sus fortalezas y amenazas.

Por Alberto Hernández
27 marzo, 2015|

Por estos días el activista socialdemócrata Manuel Cuesta Morua cumplió una apretada agenda internacional que lo llevo a Estados Unidos, España, Ginebra, Bélgica, Argentina y por último Chile. En estos dos últimos países presento su libro ensayos progresistas desde Cuba. Varias de sus intervenciones y entrevistas pueden leerse en internet.

Al portavoz de arco progresista, grupo que integra espacio abierto, luego de 23 años de labor ininterrumpida en la oposición, ya se le considera hoy un referente en la disidencia cubana. Sin duda, muestra tener capacidad, preparación y cultura general.

El también coordinador de la plataforma “Nuevo País” y gestor del proyecto “Consenso Constitucional” brinda una buena imagen personal, se desenvuelve con facilidad en público y ha ido ganando experiencia en el arte de manejarse con la prensa no por gusto algunos medios occidentales lo califican de prominente opositor.

En sus intervenciones tiene un discurso coherente, aunque por momento resulta algo ambiguo. Pero sabe trasmitir pausadamente sus ideas y argumentos como invitando a la reflexión y nunca imponiendo sus posiciones. Características estas que escasean entre algunas figuras de la disidencia en la isla.

Impresiona ser inteligente aunque también da la sensación que se esfuerza en demostrarlo, como buscando imprimir su sello distintivo que le diferencie del resto de los líderes opositores internos, especialmente de aquellos que considera incapaces de generar proyectos novedosos que contribuyan a alcanzar el anhelado cambio democrático.

(Manuel Cuesta Morúa y Laritza Diversent durante la reunión con el Presidente Barack Hussein Obama durante la Cumbre de Panamá 2015)


Pareciera que ese es su objetivo en la vida convertirse en la figura capaz de liderar el cambio en Cuba. Al menos su trayectoria demuestra que hace un buen tiempo viene trabajando y vendiéndonos hábilmente esa imagen. Y en ello debemos reconocerle un relativo éxito, pues ha conseguido incrementar su presencia en escenarios internacionales donde cada vez se da mas a conocer.

En su último viaje a Estados Unidos al ser entrevistado por el periodista dominicano Oscar Haza en su programa Ahora, lo presento como el opositor más inteligente en Cuba, y Cuesta Morua, dejándose arrastrar por el ego, solo atino a responderle el más reflexivo.

Tal respuesta revela su proyección psicológica de colocarse por encima del resto de los líderes de la oposición interna. Y aunque pudiéramos entender su aspiración, primeramente debe ganárselo, demostrándolo con inteligencia y promoviendo una agenda de consenso que invite a la unidad necesaria en una disidencia lamentablemente marcada por el caciquismo y la fragmentación.

Por ello le aconsejaría no apresurarse y, sobre todo, no confundir deseos con realidad. También le recomendaría más humildad, pues todavía está lejos de alcanzar la talla de algunas prestigiosas figuras de la oposición con más aval y trayectoria que él. Como cubano e historiador de formación debería asumir esa máxima martiana de honor a quien honor merece.

Un elemento que pesa en contra de Cuesta Morua es que se le conoce como discípulo de Elizardo Sánchez Santacruz, lo que para muchos opositores a ambos lados del estrecho de la Florida no es una buena carta de presentación, debido a los conocidos antecedentes que pesan sobre el presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional.

Tampoco es bien visto el hecho de que al igual que Elizardo Sánchez- fue uno de los escasos disidentes que la dictadura permitió realizar en el 2000 una gira por varios países europeos que concluyo en estados unidos. Sin embargo, a su regreso no tuvo ningún contratiempo con la policía política, al menos que haya trascendido a los medios.

En realidad Cuesta Morua nunca ha estado preso ni siquiera integro el grupo de los 75 disidentes que sufrieron injusta prisión durante la ola represiva conocida como la primavera negra de 2003, cuestión que despierta la suspicacia de algunos opositores dentro y fuera de la isla que se preguntan ¿por qué razón no corrió igual suerte?

Por otra parte, una fuente vinculada al Comité Ciudadano de Integración Racial al que también pertenece Cuesta Morua-, comento, a condición de conservar el anonimato, que la actual joven pareja del portavoz de “Arco Progresista”, Liliana Ruíz Andarcio, no es vista con agrado entre sus seguidores, pues, entre otras cosas, actúa como si fuera la primera dama. Todo lo contrario a su ex esposa, Gloria Llopis, una humilde y honesta maestra que lo apoyaba en todo y sin pretensión alguna de protagonismo, pero a la que el con sus frecuentes infidelidades llego hasta humillar en público.

De acuerdo a la misma fuente, un hecho que pudiera ser una amenaza y destapar un escándalo que lapidaria las aspiraciones de este opositor socialdemócrata es que un belga nombrado Dirk van der Brocke – que siempre ha sido muy solidario con la oposición cubana- respondiendo a una petición del propio Cuesta Morua le entrego más de 30 mil euros para la adquisición de una casa en el céntrico municipio de Centro Habana, que sería utilizada para actividades opositoras.

(Dirk Van den Broeck; foto de archivo)

Sin embargo, según la propia fuente, el sr. der Brocke está preocupado porque ha transcurrido bastante tiempo y no tiene señal que la referida casa haya sido adquirida ni tampoco noticia del paradero del dinero, sospechando que fue estafado.

Dice un conocido un refrán que cuando el rio suena es porque algo trae. Y ciertamente en Miami también fue acusado de estafador. Ello sucedió a finales de enero de este año cuando la ex integrante las Damas de Blanco, con residencia actual en los Estados Unidos, Lilian Castañer, interrumpió una conferencia de prensa en la casa Bacardi y le lanzo a la cara esa dura acusación que dejo estupefactos a todos los presentes.

Según explica Castañer que insiste en denunciarlo en las redes sociales – antes de establecerse en los Estados Unidos, Cuesta Morua la timo al convencerla de no vender su apartamento valorado en 8 mil dólares ubicado en calle J No. 104 entre Calzada y 9na. en el capitalino municipio del Vedado, con la supuesta finalidad de utilizarlo en apoyo a las actividades opositoras, pues como está muy cerca de la embajada norteamericana le posibilitaría recoger
firmas de los cubanos que van a solicitar visas para su proyecto “Asamblea Constituyente Ahora”.


(Lilia(n) Castañer Hernández; fotos y comentarios añadidos por el bloguista de Baracutey Cubano)

De acuerdo a la ex Dama de Blanco, Cuesta Morua se comprometió en gestionar esa suma de dinero con sus contactos en los Estados Unidos y otros países europeos y latinoamericanos, mencionándole entre otros nombres a un tal Aimel Ríos, a cambio de que ella dejara en el apartamento al periodista independiente José Alberto Álvarez Bravo.

Pero lo cierto es, precisa la desesperada mujer, que hasta la fecha no ha recibido un solo centavo y el apartamento tampoco se utiliza en actividades opositoras sino que es alquilado ilegalmente como casa de citas y que frecuenta con bastante regularidad Cuesta Morúa.

En fin, esas son algunas amenazas y hasta debilidades que este opositor socialdemócrata deberá sortear con inteligencia si quiere evitar se interpongan en sus aspiraciones políticas. Ciertamente tiene fortalezas que le ayudan, pero el mayor reto que tiene por delante es lograr la articulación de una estrategia que convierta a la disidencia en una verdadera opción política y, sobre todo, persuadir a los demás líderes de la oposición interna como también en el exilio de su capacidad para liderar el cambio en Cuba.