BARACUTEY CUBANO

Castro critica a "hipócrita" Europa y lanza advertencia a socialistas españoles
Cárdenas (Cuba), Miércoles 7 de diciembre 2005 (EFE).-
(CUBANET)

Fidel Castro arremetió hoy de nuevo contra Europa, el "pérfido imperio" de EEUU y lanzó una advertencia a los socialistas españoles, sin mencionarlos explícitamente, por unas recientes críticas a su gobierno. El líder cubano encabezó en Cárdenas, la ciudad natal del niño balsero Elián González (150 kilómetros al este de La Habana), un acto oficial por su duodécimo cumpleaños y el sexto aniversario de la "Batalla de ideas", como se bautizó a la estrategia de movilizaciones para exigir a EEUU la devolución del balserito a Cuba.
Durante su discurso, Castro se refirió, sin mencionar su nombre, a unas recientes declaraciones de la secretaria de Relaciones Internacionales del Partido Socialista Obrero España (PSOE), Trinidad Jiménez. La dirigente socialista española instó el lunes al régimen de La Habana a "acabar con las prácticas contra la oposición política" y condenó los "actos de repudio" contra opositores socialdemócratas, como Manuel Cuesta Morúa.
( Trinidad Jiménez -->)
Castro habló de "una que se autotitula funcionaria de un partido que dice que es socialista o socialdemócrata". "No quiero mencionar nombres de partido, pero que sepan muy bien que estamos con ojo avizor y con una buena colección de datos en la mochila", advirtió.
El presidente criticó a "esa Europa rematadamente hipócrita" y se refirió sarcásticamente a "esos países que avanzan hacia la democracia muy velozmente, procedentes del horrible campo socialista, y que no sabíamos que tenían centros de tortura organizados por Estados Unidos". "Son satélites, supersatélites corrompidos y mercanchifleados", denunció el líder cubano ante más de 3.000 personas asistentes al acto, entre ellos cientos de niños, compañeros de Elián.
Castro aprovechó también para criticar a Estados Unidos, al que se refirió como un "imperio macabro, pérfido y en decadencia" que ha impuesto un "orden mundial insostenible". "Ese imperio cada día está peor, y esta revolución cada día está mejor y estará mejor", afirmó el mandatario cubano, de 79 años, que llegó al poder en enero de 1959 liderando la revolución.
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TRINIDAD JIMENEZ NO SE QUEDA CALLADA Y LE RESPONDE A FIDEL CASTRO

Jiménez (PSOE) responde a Fidel Castro que acabe con los actos de repudio y reitera su apoyo a Cuesta Morúa
Europa Press, 7 de diciembre de 2005.
La secretaria de Relaciones Internacionales del PSOE, Trinidad Jiménez, aseguró hoy que la defensa y los derechos fundamentales de las personas en cualquier parte del mundo "no tienen ningún tipo de incompatibilidad con el mantenimiento de unas buenas relaciones y un diálogo crítico con el país que no respete dichos postulados", en referencia explícita al apoyo ofrecido por los socialistas al disidente y portavoz de la ilegal Coalición Progresista de Cuba, Manuel Cuesta Morúa.
Tras reiterar nuevamente la petición al Gobierno de Fidel Castro del cese de los actos de "agresión y repudio" contra este "socialdemócrata", lo cual, según advirtió, "ha hecho, hace y volverá a hacer en un fututo", Jiménez explicó que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero decidió afrontar una nueva etapa de las relaciones entre España y Cuba en la cual se restableciera un "diálogo crítico", circunstancia que, a su juicio, "no significa en absoluto que no se puedan criticar las actuaciones de dicho gobierno cuando lesiona derechos fundamentales de cualquier persona o dirigente político".
Para la secretaria de Relaciones Internacionales del PSOE, mantener una buena relación, sobre todo cuando se trata de países donde España tiene un especial interés y vínculo, "no es un obstáculo con hacer de manera permanente y clara una defensa de los derechos fundamentales y las libertades públicas de las personas".
"Cuando un dirigente socialdemócrata de un país, sea el que sea y en cualquier lugar del mundo, sufre algún tipo de agresión y minusvaloración del respeto de sus derechos fundamentales y de sus libertades, desde luego el PSOE tiene la obligación ética y política de salir en su defensa y mostrar su solidaridad", añadió.
Además, y en alusión a las manifestaciones de Castro realizadas la pasada madrugada en las que la calificó como "una que se autotitula funcionaria de un partido que dice ser socialista", Jiménez subrayó que "no tiene por costumbre oír los discursos de Fidel" porque, en sus palabras, "no sabe si se refería a ella o no". "Se refiere a una funcionaria y yo soy la secretaria de Relaciones Internacionales del PSOE y la portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, aunque dejo muy claro que si soy la responsable de las declaraciones en las que defiendo al disidente Cuesta Morúa", insistió.
Finalmente, y después de recordar que lleva 25 años haciendo política, aseguró que durante todo este tiempo no ha recibido "advertencia ni amenaza de nadie" y que simplemente siguió indicaciones políticas del secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. "Son las únicas instrucciones a las cuales he atendido, a parte de seguir el dictado de mis propias convicciones democráticas de respeto a los derechos y libertades públicas", concluyó.

Nota del autor del blog.
Buena esa respuesta de Trinidad Jiménez a Fidel Castro, pero sería mucho mejor si esa defensa la extendiera a toda la oposición pacífica que lucha por los derechos humanos en Cuba, en particular, por los derechos civiles y políticos. La Internacional Socialdemócrata se preocupa de los socialdemócratas de todos los países, luego esa defensa partidista de Trinidad Jiménez, sugerida por José Luis Rodríguez Zapatero, pueden ambos dejársela a esa Organización y asumir ambos que la defensa de los derechos y libertades públicas van mucho más allá de los colores y las siglas partidistas.
En la foto el autor del blog conversando con el socialdemócrata belga Kirk representante de Manuel Cuesta Morúa en la actividad " Por una Posición Común y el establecimiento de una Hoja de Ruta para la Democratización de Cuba ", efectuada el 10 de octubre de este año en Madrid. Kirk estaba sorprendido del "acto de repudio" que en ese día se le estaba haciendo a Cuesta Morúa en La Habana, y por el hecho que muchos cubanos ahí presentes, rechazábamos la conducta de Zapatero con respecto a la situación cubana, pues me decía Kirk, que él estaba en esa actividad representando a Morúa porque el gobierno de Zapatero le había costeado los gastos para participar en la misma. Al frente nuestro, Luz Modroño, activista de Amnistía Internacional y miembro del PSOE, quién defiende los derechos de los cubanos de la Isla y el periodista Pedro Corzo, de Radio Martí, quién estaba cubriendo esa actividad.

«Trato inaceptable». Así considera el Gobierno español la actitud del Gobierno cubano hacia el diputado popular y secretario de Relaciones Internacionales del PP, Jorge Moragas, a quien las autoridades castristas impidieron la pasada madrugada el acceso al país. No habían pasado ni 24 horas desde que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, hablase de un giro en la política hacia la isla. No obstante, su Ministerio de Exteriores reaccionó con rapidez y ayer mismo, llamó a consultas a la embajadora cubana en España para pedirle «explicaciones urgentes». Pero desde el PP se criticó con dureza la política exterior de ZP, causante, a su juicio, del incidente, porque «prefiere ponerse al lado de Castro en vez al de los demócratas».No ha podido tener peor suerte el Ejecutivo: Sólo un día después de que el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, anunciara en Hungría el «giro» de la política española hacia la isla caribeña gobernada por el dictador Castro, se produce el primer incidente diplomático grave entre ambos países durante el Gobierno socialista. Las autoridades cubanas prohibieron la pasada madrugada la entrada al país del diputado del Partido Popular y secretario de Relaciones Internacionales de esta formación, Jorge Moragas (que iba entrevistarse con disidentes en la isla) bajo el argumento de que estaba acusado de ser un «enemigo de la Revolución» y de mantener actitudes «injerencistas» y de «provocación política». En un comunicado, las autoridades cubanas no perdieron oportunidad de referirse al ex presidente del Gobierno español, José María Aznar, a quien calificaban de «frustrado y patético». Desde el Partido Popular, se lanzó ayer una dura andanada contra el Gobierno de Zapatero, a cuya política exterior achacan el incidente sufrido en la isla por Moragas. Así, el secretario general del PP, Ángel Acebes, dijo que lo ocurrido es «una prueba más, lamentable, de la política internacional del gobierno socialista, en la que ya nadie sabe a que atenerse, ni dentro ni fuera de España». Para el político popular, el Gobierno ha preferido, en contra de la política de la Unión Europea, ponerse junto al dictador, en lugar de junto a aquéllos que defienden la democracia en Cuba. «No puede entenderse la voluntad de Zapatero de querer agradar a Castro», destacó Acebes. Tras preguntarse qué «beneficios le aporta esto a la democracia y la libertad en Cuba», pidió al Gobierno una política firme y comprometida con aquéllos que sufren privación o limitación de sus derechos en la isla, estar en consonancia con la política europea y no generar incertidumbre. Por lo que respecta a los hechos ocurridos en el aeropuerto, la Cancillería de Cuba hizo un comunicado en el que sostiene que el diputado del PP intentó entrar en el país «fraudulenta e ilegalmente, bajo el estatus migratorio de turista». Asimismo, añade que «las actividades que públicamente declararon como objetivos de su viaje constituyen una violación flagrante de nuestra soberanía y están previstas y sancionadas en nuestras leyes. Se trataba de una grosera provocación política contra Cuba». El comunicado califica al diputado popular de «acérrimo enemigo de la revolución cubana», y subraya que la visita tenía «la encomienda de ofrecer respaldo y solidaridad a los mercenarios que operan en nuestro territorio a sueldo de los Estados Unidos». Igualmente, el comunicado califica a José María Aznar, de «frustrado y patético», y asegura que el viaje del parlamentario español está financiado por el actual presidente de los Estados Unidos, George W. Bush, «para organizar actividades y eventos contra Cuba». El Gobierno español ha reaccionado con rapidez y el Ministerio de Asuntos Exteriores ha convocado con carácter urgente a la embajadora de Cuba en en Madrid, Isabel Allende Karem, para pedirle explicaciones por la expulsión de la isla de Jorge Moragas. Para el ministro Moratinos, Jorge Moragas recibió un trato «inaceptable como ciudadano español y como diputado del Partido Popular». En un comunicado difundido ayer, Exteriores lamenta que las autoridades cubanas hayan rechazado la entrada en ese país del diputado del PP y hayan negado su acceso a responsables consulares españoles en La Habana. El Ejecutivo reafirma en la nota de Prensa su deseo de seguir trabajando en la democratización y en la defensa de los derechos y las libertades en Cuba. Pero el ministro de Exteriores también le lanzó un mensaje a los populares y les pidió que que no conviertan el asunto de Cuba en una cuestión de «política interna» y que se haga «política de Estado» respecto a este país, algo que dirigentes populares lamentaron profundamente. Finalmente, el ministro holandés de Asuntos Exteriores, Bernard Bot, expresó ayer la «indignación» y la «cólera» de su Gobierno tras la expulsión de Cuba de las dos diputadas holandesas que viajaban en compañía del también diputado español Jorge Moragas. Por su parte, el presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, calificó de «atropello a la ciudadanía española» el incidente.