lunes, febrero 06, 2006

EL TIEMPO DEL DESPRECIO

Nota del autor del blog;
SE SIGUE DESACREDITANDO LA ONU, Y EN PARTICULAR, LA UNESCO. SUPONGO QUE FIDEL CASTRO SERA EL PROXIMO PREMIADO.

Parece ser que los 7 ilustres miembros del jurado internacional que tuvieron la responsabilidad de otorgar el Premio Internacional José Martí correspondiente a este año 2005, premio del Consejo Ejecutivo de la UNESCO, nunca han leido a José Martí ni tampoco están al tanto de los acontecimientos en Venezuela; aunque, para ser más objetivo, lo más probable es que no sean esas las causas de dicho otorgamiento, sino la afinidad ideológica acompañada de cierto grado de desinformación voluntaria, aunque no descarto, después del escándalo de corrupción del Programa de la ONU "Petroleo por Alimentos", que pueden existir otros factores.
No tiene sentido premiar a Hugo Chávez Frías que ha dividido a su pueblo con un galardón que se otorga "para honrar a un individuo o institución que haya contribuido a la unidad e integración de los países de América Latina y el Caribe y a la preservación de su identidad, de sus tradiciones culturales y de sus valores históricos" y mucho menos con un Premio que lleva el nombre de José Martí, persona no asociada a engaños y demagogia. La única unidad que ha traido Chávez al pueblo venezolano es la de sus opositores; veamos:
En el muy cuestionado Referenum Revocatorio celebrado en Venezuela en agosto del 2004, el 58 % de los que votaron, votaron a favor de Chávez y el 42 % votaron en contra. El 30% de los votantes con derecho a voto se abstuvo de participar. En este mes de diciembre, el 75 % de los venezolanos se abstuvo de votar en las elecciones para elegir a los miembros de la Asamblea Nacional venezolana, Los 5 partidos políticos más numerosos se habían retirado de participar y le habían pedido a los venezolanos que se abstuvieran.
Ese último resultado habla muy claramente de como ven actualmente lo venezolanos a Hugo Chávez Frías, pero guiándonos por la "victoria" chavista alcanzada en el Referéndum Revocatorio podemos afirmar, sin equivocarnos, que la sociedad venezolana, el pueblo venezolano, está dividido. José Martí, patriota cubano cubano cuyo nombre lleva ese Premio de la UNESCO expresó:
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Y cuando todas las manos
Son pocas para el afán,
¡ Oh , patria, las usarán
En herirse los hermanos !
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Algo en el alma decide,
En su cólera indignada,
Que es más vil que el que degrada
A un pueblo, el que lo divide
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El Nuevo Herald
Posted on Sun, Feb. 05, 2006
El tiempo del desprecio
ALEJANDRO GOMEZ
Durante mucho tiempo, quienes creen verdaderamente en la democracia han esperado que losorganismos internacionales levanten la voz contra las tropelías de los sátrapas que todavía duran en América Latina, es decir, Castro y Chávez. No sólo no se han hecho escuchar, sino que han premiado a uno de ellos.
El viernes, el teniente coronel ''bolivariano'' y socialista del siglo XXI, recibió en La Habana el premio José Martí otorgado por el organismo para la cultura y la educación de Naciones Unidas, la UNESCO. Lo merece, según este organismo, por su labor por la integración latinoamericana. Nadie sabe si el teniente coronel ha hecho algo por esa integración. Lo que sí se sabe es que su ineficiencia crónica no le ha permitido integrar a Caracas con la costa, donde están el puerto y el aeropuerto más importantes de su país, reparando el viaducto que conecta ambos sitios.
Además de ofender a Martí, usando su nombre para premiar al teniente coronel, la UNESCO se ha quedado sin cultura. Porque la cultura cubana no puede estar presente en los festejos de La Habana simplemente porque está presa o en el exilio.
Está con Raúl Rivero en España o en los libros de Guillermo Cabrera Infante, prohibidos en La Habana. Se fue con Reynaldo Arenas, Néstor Almendros, Zoé Valdés, Carlos Victoria y tantos, tantos otros.
Está en la dignidad que tuvieron frente al régimen hombres como Lezama Lima y Virgilio Piñera.
El jueves, la dictadura castrista tiró seis cadáveres más al rostro de la opinión pública internacional. Aparecieron en las Bahamas, muertos en el intento de abandonar la isla. Más allá de las discusiones bizantinas de si los exilados son económicos o políticos, eran, simplemente, seres humanos que huían del infierno.
Mientras, los países de la región siguen en silencio y el ''etnicista'' racista peruano Ollanta Humala declara que su mayor ilusión es ir a conocer a Fidel Castro. Paradójicamente, uno de los motivos de quienes se lanzan al Estrecho de la Florida es no verlo ni escucharlo nunca más.
Silencio ante los muertos y silencio ante la bufonada de la UNESCO, que ofende a la cultura. Ya en 1954, cuando la cultura española estaba en la cárcel o el exilio, le abrió las puertas a Franco. Sus funcionarios no han aprendido nada o perseveran en la mala fe.
<-- ( Francisco Franco, dictador español, en su despacho)
Mientras tanto, los disidentes se pudren en la cárcel y sus familias son perseguidas, la doctora Hilda Molina sigue esperando conocer a sus nietos ante la negativa de Castro a dejarla viajar a Buenos Aires y la indiferencia del gobierno argentino.
En los años treinta, André Malraux escribió el Tiempo del desprecio para dejar testimonio de los horrores del nazismo. El silencio y la hipocresía ante la brutalidad autoritaria han instalado entre nosotros un nuevo tiempo del desprecio por el que nuestros prohombres deberán rendir cuentas de sus cobardías.