miércoles, septiembre 13, 2006

EL REGIMEN SE PROPONE UNIR A LOS "NO ALINEADOS" CONTRA ESTADOS UNIDOS E ISRAEL

EL REGIMEN SE PROPONE UNIR A LOS "NO ALINEADOS" CONTRA ESTADOS UNIDOS E ISRAEL


Por Anahí Rama
La Habana
Reuters
Infosearch:
José F. Sánchez
Jefe de Buró
Cuba
Dept. de Investigaciones
La Nueva Cuba
Septiembre 12, 2006



El Movimiento de Países No Alineados (MPNA) fustigaría a Estados Unidos y su aliado Israel por sus agresiones a varios países en un documento impulsado por Cuba, sede de la XIV reunión cumbre del movimiento iniciada el lunes.

Los 116 integrantes del MPNA -una reliquia de la Guerra Fría que la isla quiere revitalizar- firmarían un documento en el que rechazan el recrudecimiento del embargo que Washington aplica hace décadas contra Cuba y se muestran preocupados por su política hostil contra Venezuela. Además, exigen que Israel detenga sus ataques militares contra Líbano y los palestinos.

Al abrir casi una semana de reuniones del MPNA, que iniciaron con deliberaciones de funcionarios técnicos, el canciller cubano, Felipe Pérez Roque, dijo que el movimiento debe hacer sentir su peso, porque equivale a dos tercios de los miembros de la asamblea general de Naciones Unidas.

La asamblea de la ONU se reunirá desde esta semana en Nueva York. "Debemos demostrarle al mundo nuestra fortaleza, nuestra capacidad de enfrentar juntos los desafíos que nos impone un mundo regido por los más poderosos," dijo el canciller, uno de los principales hombres del gobierno de Fidel Castro, que delegó temporalmente el poder el 31 de julio en su hermano Raúl debido a una cirugía intestinal que hizo temer por su vida. El borrador del documento final, que está siendo discutido por las delegaciones y debe ser aprobado por los jefes de Estado de los miembros del MPNA que se reunirán viernes y sábado, dice que estos "consideraron con preocupación las políticas agresivas del gobierno de los Estados Unidos contra Venezuela." Además, expresarán "su preocupación por el aumento de las acciones (...) encaminadas a afectar la estabilidad de Venezuela, incluido el reciente establecimiento de una oficina para intensificar el espionaje y la recopilación de material de inteligencia contra Venezuela y Cuba." Fuentes diplomáticas presentes en las reuniones dijeron a Reuters que el documento podría ser aprobado sin mayores cambios, aunque se moderaría el lenguaje. Por su parte, analistas advirtieron que si la declaración final asume una posición demasiado dura contra Estados Unidos, difícilmente será firmada por países moderados como India, Sudáfrica o Pakistán.

El presidente venezolano, Hugo Chávez, uno de los más fuertes críticos de Washington en América Latina y el principal aliado de Castro, ha denunciado planes de Estados Unidos para asesinarlo. No está claro si Castro participará en la reunión de mandatarios del MPNA, creado en 1961 como alternativa al mundo bipolar de la época. Entre los 50 jefes de Estado y de Gobierno que se darán cita en la isla estarán fuertes críticos de Estados Unidos como el propio Chávez y los presidentes de Bolivia, Evo Morales, y de Irán, Mahmoud Ahmadinejad, reunidos a escasos kilómetros de suelo norteamericano.

El MPNA rechazaría el reforzamiento del embargo de décadas que Estados Unidos aplica contra Cuba, de gobierno comunista, y pedirá que devuelva el territorio ocupado por la base naval de Guantánamo, en el oriente del país, según el borrador. Los países no alineados exigirán, además, que Israel cese sus bombardeos contra Líbano y dirán que el país "debe ser declarado responsable de sus crímenes" contra los libaneses, agregó el proyecto. A pesar de que no está aún en el borrador de documento, Pérez Roque ha dicho que el MPNA defendería a Irán de las presiones de Washington para impedirle que desarrolle un programa nuclear que Teherán asegura tiene fines pacíficos.

Estados Unidos, que asistió a la anterior cumbre del movimiento en el 2003 como invitado, declinó asistir esta vez, mientras China encabezará su delegación con el viceministro de Relaciones Exteriores, Yang Jiechi. Observadores creen que la cumbre serviría para una transferencia simbólica de liderazgo de Castro a Chávez, un discípulo político con el carisma -y además el dinero por los altos precios del crudo- para hacer realidad proyectos sociales con los que el líder cubano quiere transformar al Tercer Mundo. Pero, en Latinoamérica, el evento ha dividido a los países entre los amigos de Cuba, básicamente Bolivia y Venezuela, y los que siguen perteneciendo al movimiento pero están muy distanciados del gobierno de Castro como Colombia, cuya delegación está encabezada por su vicepresidente.