miércoles, septiembre 20, 2006

RAÚL CASTRO FRAGUA UN FÉRREO CONTROL SOBRE CUBA, SEGÚN EXPERTOS

RAÚL CASTRO FRAGUA UN FÉRREO CONTROL SOBRE CUBA, SEGÚN EXPERTOS


Por Emilio J. López
Miami EEUU
EFE Infosearch:José F. Sánchez
Jefe de BuróCuba
Dept. de InvestigacionesLa Nueva Cuba
Septiembre 20, 2006



La cristalización de una "línea dura raulista" y la consolidación de sus hombres claves en el Gobierno cubano confirman que Raúl Castro ejerce el poder y "que Fidel no vuelve", afirmaron hoy en Miami dos expertos. La selección de Esteban Lazo, hombre fuerte del Partido Comunista, al frente de la próxima delegación cubana ante la ONU es una muestra de que "Raúl Castro está gobernando y Fidel Castro no vuelve", afirmó a Efe Jaime Schulicki , profesor del Instituto de Estudios Cubanos de la Universidad de Miami (UM).

Schulicki sostuvo que la cesión de poder de Fidel Castro a su hermano menor el pasado 31 de julio, tras sufrir una delicada intervención quirúrgica, es definitiva y permite a éste configurar un Gobierno de "gente de línea durísima, temible".Asistimos a la "continuidad de un régimen muy cerrado", de "unidad", a una sucesión que sólo los ilusos pueden creer abierta a las reformas políticas y económicas, apuntó.

Con la elección de Lazo, prosiguió Schulicki, se vertebra una línea ofensiva que pretende "aliarse en la ONU con las naciones más radicales, militantes y antiamericanas del mundo". A su juicio, la estrategia de enviar a Lazo a la ONU encarna un "simbolismo político" a ultranza: Cuba "no está interesada en una normalización de relaciones con Estados Unidos"."Lazo es negro, es decir, a Cuba le interesa también "aliarse con los grupos del Tercer Mundo, especialmente del continente africano", aseveró Schulicki, que estableció como prioridades de Raúl Castro la "consolidación del poder", la estrangulación de la "disidencia" dentro del régimen y el mantenimiento de "la población tranquila".

Tanto Schulicki como el analista estadounidense Briam Latell coincidieron en señalar que el vicepresidente cubano, Carlos Lage, podría convertirse en el número dos de Raúl Castro y asumir, según Latell, un papel "civil influyente" que pudiera ofrecer a los "reformistas" del régimen "más esperanza". Para Latell, el ministro cubano del Azúcar, el general Ulises Rosales del Toro, es otra carta que Raúl esconde en el bolsillo. Se trata de un general que "es muy probable que suba en importancia" en la configuración del Gobierno de Raúl Castro, indicó.

Respecto a la designación de Ramiro Valdés Menéndez, uno de los "históricos" de la revolución, como nuevo ministro de la Informática y Comunicaciones de Cuba, Schulicki dejó claro que se trata de un hombre "temible" con el que se pretende consolidar un modelo de "unidad"."Ni Raúl ni sus generales quieren que Valdés se convierta en número dos del régimen y dudo que él (Ramiro) lo consiga", opinó Latell, que acaba de publicar traducido al español "Después de Fidel: la historia íntima del régimen de Castro y el próximo líder".

Durante casi 48 años de "Gobierno militar cubano", no se han experimentado "intentos de golpe" de estado, ni "rebelión de mandos", y tan sólo una o dos defecciones de "alto nivel", señaló Latell, antiguo analista de la CIA, al evaluar la posibilidad de una trama de conspiraciones. Sin embargo, Latell opinó que los "observadores" no poseen todavía "información fiable" sobre la "actitud" de los generales más jóvenes y coroneles, y se preguntó por qué Raúl Castro "apareció el pasado 14 de junio ante sus propios oficiales vestido con un chaleco antibalas" .