jueves, diciembre 14, 2006

PARABIENES A CONSENSO CUBANO

Nota del Blogguista

Cambio paulatino pero TOTAL hacia la Democracia, la Justicia y los Derechos ciudadanos y no cambio incompleto o mediatizado como ha ocurrido en algunos países exsocialistas de Europa del Este.
**************
Parabienes a consenso cubano

Por Oscar Espinosa Chepe


LA HABANA, Cuba - Diciembre (www.cubanet.org) - El cambio paulatino en la forma de pensar de la mayoría de los cubanos es ostensible desde hace algún tiempo. Al odio y el rencor que reinó durante muchos años en nuestra sociedad, poco a poco y algunas veces con dificultades, los sustituye la idea de que por encima de diferencias ideológicas está el hecho irrebatible de pertenecer a una nación, la cubana.

Este proceso, no sólo se evidencia en la Isla, sino también entre nuestros compatriotas radicados en el exterior. Cada vez estamos más convencidos de que los problemas nacionales no pueden resolverse a través de la confrontación, sino mediante un clima de concordia y reconciliación, o sea la unidad dentro de la diversidad, la cual bien conducida puede ser motor de progreso.

"La Propuesta de Agenda Humanitaria para la Familia Cuba", presentada por Consenso Cubano recientemente, un espacio plural formado en el exilio por un número apreciable de importantes organizaciones, es un ejemplo de lo expresado anteriormente. En un documento sabio y balanceado, plantean tres puntos con sus subdivisiones concretas para avanzar soluciones al acuciante problema de la división de la sociedad cubana. El Primero contempla los derechos de libre movimiento y reunificación familiar. El Segundo incluye el derecho de comunicación fluida accesible y a precios de mercado. El Tercero presenta el derecho al envío y recepción de ayuda familiar y personal.

Los derechos reclamados poseen sólido basamento legal en Declaraciones, Cartas y Convenios reconocidos internacionalmente, incluso por el gobierno cubano. El análisis realizado de los pasos que se plantean ejecutar, al mismo tiempo que denuncia las violaciones y los abusos que durante años han cometido las autoridades de La Habana contra los emigrantes y sus familiares, como resulta en grado superlativo la confiscación de bienes, pérdida de empleo y otras medidas de hostigamiento contra las personas que desean abandonar el territorio nacional, entre otros hechos realmente monstruosos y brutales, también critica la política seguida por el gobierno norteamericano en cuanto a las limitaciones al envío de remesas y paquetes por razones humanitarias, así como a los viajes a Cuba.

Realmente son posiciones justas y valientes. Estados Unidos, su sociedad y gobierno, han sido muy generosos en recibir a los refugiados cubanos y darle toda clase de oportunidades para que los perseguidos en su Patria reconstruyan su vida y también tengan derecho a la prosperidad. Pero esa actitud altruista compromete aún más a los cubanos a ser sinceros con nuestros amigos, y expresarles con toda franqueza las cuestiones en que no podemos estar de acuerdo. Ese es otro logro del documento mencionado; refleja una clara posición de honradez.

La Propuesta presenta implicaciones positivas más allá de la agenda humanitaria para la familia cubana. Muchos puntos tienen derivaciones promotoras del entendimiento entre los cubanos; de la transición pacífica de nuestra sociedad hacia una meta común democrática y de respeto a los derechos humanos.

Una cuestión concreta, abarcadora de posibilidades de progreso para la nación, es la invitación a permitir la utilización de remesas destinadas a la ayuda familiar para la creación de pequeñas empresas y actividades de auto empleo. Esta propuesta complementa las ideas que hace unos meses presentó el Grupo de Estudios Cubanos (Cuba Study Group, presidido por el compatriota Carlos A. Saladrigas) sobre la creación de un fondo financiero para el otorgamiento de microcréditos con vista a la formación de empresas pequeñas y medianas, PYMES, en nuestro país.

Consideramos de gran valor estas iniciativas. El gobierno cubano debería valorarlas con espíritu amplio, e incluso complementarlas con medidas favorecedoras de tipo fiscal, crediticio y otras.

En Cuba, las PYMES crearían riquezas y sobre todo serían fuente de empleo para aliviar a la administración y las empresas estatales sobrecargadas en exceso de personal, con lo cual el fondo salarial actualmente disponible podría ser utilizado más racionalmente para elevar los deprimidos salarios, lográndose un efecto estimulador de la productividad del trabajo.

Se reconoce internacionalmente que las PYMES brindan a la economía flexibilidad y rápida adaptabilidad a los cambios del mercado, lo cual ayuda a la gran industria a adecuarse favorablemente a la alta competencia de un mundo cada vez más globalizado. Importancia vital tiene esta concepción para la agricultura cubana, hoy productivamente calamitosa, con la consecuencia de un pueblo mal alimentado y un país cada vez más dependiente de comestibles importados, perfectamente obtenibles en la campiña cubana si fueran establecidos los estímulos medianamente requeridos.

Condiciones para desarrollar estas ideas en el campo existen. Grandes extensiones de tierra permanecen sin cultivar o insuficientemente cultivadas. La creación de PYMES en la agricultura con toda seguridad haría que la alimentación del pueblo mejorara sensiblemente en un breve período de tiempo, con menos dependencia del exterior y posibilidades de crear fondos exportables.

Por supuesto, las PYMES podrían extenderse a muchas actividades productivas, el comercio y los servicios, con extraordinarias ventajas para la economía en su conjunto. Las remesas en cierta medida pudieran ser uno de los factores propulsores de un proceso, además, coadyuvador de independencia y soberanía económica.

Este nuevo documento de Consenso Cubano, junto a "Los Pilares", presentado el año pasado, representa un paso positivo para las transformaciones que requiere Cuba con urgencia. Por supuesto, se necesitan muchos pasos más, tanto por el exilio como por los cubanos residentes en la Isla. Sin embargo, esta iniciativa refuerza nuestro optimismo sobre el futuro y confirma que el proceso hacia la prosperidad de nuestro pueblo está en marcha.

Habrá dificultades interpuestas por quienes en su egoísmo se niegan a reconocer que la reconciliación es la única vía para resolver nuestros problemas, pero la dinámica de la transición ya está en acción. Pasos firmes en el trayecto hacia la democracia se están dando.

Esta información ha sido transmitida por teléfono, ya que el gobierno de Cuba controla el acceso a Internet.
CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza la reproducción de este material, siempre que se le reconozca como fuente.