martes, diciembre 06, 2011

Desde Cuba Juan González Febles: ¡TOY INDIGNAO!

Tomado de http://www.infiernodepalo.com



¡TOY INDIGNAO!


Por Juan González Febles

El gobierno cubano anunció que permitirá el desfile de las Damas de Blanco sin las de apoyo. La respuesta a esto parece estar en una declaración de la organización que las declara a todas de blanco, sin damas de apoyo. La buena noticia podría ser que existe alguna instancia, alguna oficina, algún oficial o algún cabo interino facultado para autorizar la manifestación pública y pacífica contra el gobierno. ¡Waoh! La mala, es que Cuba continúa como un país de permisos, que se otorgan o no.

Si es cierto eso de que ‘lo que está de moda no incomoda’, entonces lo más novedoso que está en el ajo internacional son los llamados “indignados”. Ellos, los indignados, son el último grito a escala internacional. Ellos se indignan porque se sienten preteridos en sus países de origen. Como están irritados o indignados como se autodefinen, salen a la calle para compartir su indignación con todo el que quiera participar de la misma. La pregunta de rigor, podría ser: ¿Y lo mío qué? ¿Aquí también?

Un amigo que lucha (trabaja, lucha su sustento y el de su familia) en un agromercado, me comentaba sus frustraciones diarias. Comentábamos lo que comenta cualquier cubano de a pie. No es necesario detenerse en eso. El caso es que mi amigo concluyó en una afirmación categórica. Dijo, con el acento trascendente que le salió del alma: “¡Toy indignao, coño!”.

Cuando le preguntó por qué, me dijo:
-Esta gente va a descongelar Miramar pa venderlo. Como se metieron lo mejor, inventaron eso de la compraventa libre de casas. ¿Quién tiene para comprar una casa o un carro? ¡Esta gente! Esa volá es pa ellos y no hay más na. ¡Los únicos que tienen con qué, pa poner un buen negocio, son ellos! ¿Y lo mío qué? Yo estoy tan indignao como los de España y Nueva Yor- dijo a modo de conclusión.

Aproveché y le dije:
-Ven acá socio, ¿por qué no te tiras para la calle y le das sentido y dirección a tu “indignación”?

Sorprendido por lo que consideró un golpe bajo, me dijo:
-Yo tengo hijos, mujer y familia. El muerto que lo ponga otro. Tú te tiraste con la guagua andando, tu decisión, tu maletín. Esta gente no cree en derechos humanos ni un carajo. Mira, se echaron a la jefa de las Damas de Blanco, ¿qué pasó? ¡Na! Pal hueco y se acabó. No mi socio, lo mío es montarme en algo y volar el caballo de aquí, que esto está malo. Sigue tú en la volá de morir por la patria. Yo me voy a montar en algo y cuando llegue al paraíso, reclamo a la familia. ¡No hay más na!

-Pero, ¿estás o no indignado?
-¡Toy indignao! ¡Pero no me quiero morir!

En Cuba son muchos los indignados. Pero no se quieren morir. Personalmente, hace mucho tiempo que ando indignado. Me enferma pensar que esta gente se robó mi país. Que el Comandante destruyó la primera industria de Cuba y no está preso. Que parcelaron la nación y se la adjudicaron. Que se abrogan el derecho de ahogar toda manifestación de disensión. ¿Esta gente aceptará que los indignados que son la mayoría en Cuba se manifiesten como lo hacen los indignados del resto del mundo? ¿La única solución posible será la de mi amigo? ¿Se trata de canalizar la indignación montado en algo?

Como la inmensa mayoría, también ‘¡toy indignao!’. Sólo que en mi caso, le temo más al mar y a los tiburones, que a los segurosos.

juan.gonzlezfebles1@gmail.com