lunes, septiembre 23, 2013

¿Un Putinismo Castrista?. Mary A. O'Grady sobre Raúl Castro y la forma de gobierno de Vladimir Putin aplicada a Cub

Comentario por Alberto Luzarraga:

El artículo de O'Grady (Un Putinismo Castrista  ) comenta lo que hemos venido advirtiendo por años y que ahora finalmente se plantea claramente al estar en crisis el mecenas venezolano.
El castrismo se convertiría en un fascsimo vergonzoso porque ahora lo es, pero vergonzante, ya que no sabemos exactamente que general está en que negocio y con cuanto.
Hay diferencias significativas. Rusia es un país con enormes recursos naturales que Cuba no tiene. Para ser oligarca estilo Ruso en Cuba haría falta ser zar del níquel, y poco mas. Porque oligarca de la electricidad, la energía, los acueductos, etc. no funciona: O están en ruinas como los acueductos o necesitan mucha inversión para producir y distribuir. Difícil ser oligarca con todo el dinero y la tecnología prestada.
La agricultura tampoco da. Se vislumbra como agricultura de cultivos intensivos especializados y exportables para ser rentables. Y eso requiere muchos agricultores independientes y acceso a mercados y tratados regionales de comercio.
Servicios? Puede ser en centros de computación, servicios médicos, casas y colonias para jubilados y naturalmente turismo. Pero de nuevo requiere un grado de especialización e iniciativa imposible en un régimen controlado. Hoy en día el turismofunciona a base de salarios irrisorios y precios muy bajos. Ser zar del turismo en serio está bien difícil. Es una industria muy competitiva y no se presta a ordeno y mando, cuando haya que pagar sueldos normales, lidiar con sindicatos y prestar servicios de gran calidad.
Maquila? También puede ser pero requiere lo mismo, empleados motivado, acceso a mercados y tecnología.
Mas que oligarcas, en Cuba habría grupos conectados que se repartirían el poder y la economía. Pero si quieren depender de empleomanía eficiente o cambian o perecen. El sistema de ordeno y mando no funciona ni con empleados ni con  socios de calidad. A corto plazo un diseño estilo antigua banana republic puede tener una vida efímera con inversionistas explotadores y cortos de vista. Pero eso  no iria a ninguna parte porque la presión social daría al traste con un invento tan obsoleto como inoperante.
En resumen: Cuando llegue ese momento se acabará la era de los discursos y "descargas"y empezará la era de la realidad y el trabajo serio y productivo.
O se adaptan o se van dijo el coma-andante hace décadas. Que ironía enfrentarse al mismo problema y encima pleitos, investigaciones etc. Y ni hablar de que los hijos de papá serán reemplazados por otros con menos historia de privilegio y mas ascendiente sobre la fuerza pública. Porque no van a poder contentar  todos repartiendo migajas. Lo dicho: Siempre ocurre así .
Estudien putinismo pero entiendan: Será un putinismo barato y a corto plazo. El suficiente para recoger los matules y largarse.

Alberto Luzarraga

A.L.
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Tomado de http://futurodecuba.org/articulos_9.06.htm

¿Un Putinismo Castrista?
Por Mary A. O'Grady
 World Street Journal
 Sept. 23/2013



La columna de opinión que Vladimir Putin escribió para el New York Times no tuvo una gran acogida entre los estadounidenses. El presidente ruso, sin embargo, tiene admiradores en otros países. Se dice, por ejemplo, que algunos miembros de las fuerzas armadas cubanas estarían estudiando el "putinismo". Los posibles inversionistas extranjeros deberían tomar nota.

Desde el triunfo de la revolución gloriosa de Fidel Castro en 1959, Cuba ha necesitado un benefactor. La Unión Soviética cumplió ese papel hasta su colapso, a inicios de los 90. Cuba recibió otro salvavidas tras la elección de Hugo Chávez como presidente de Venezuela en 1998, quien comenzó a proveer a la isla con petróleo barato como política de Estado.

Incluso así, las vidas de los cubanos están llenas de privaciones. Además, los problemas fiscales de Venezuela van en aumento, lo que pone en riesgo los subsidios petroleros.

La pobreza revolucionaria no es nada nuevo. Pero los mandamases del régimen en La Habana temen que Raúl Castro enfrente serios disturbios sociales tras el fallecimiento de su hermano Fidel, que tiene 87 años y una salud frágil. Su reto es encontrar formas de alimentar a la isla sin ceder el poder, lo que podría ser fatal para algunos de ellos.

El modelo de Putin ofrece una salida. Permite realizar elecciones nominales en las que la oposición obtiene algunos escaños en el Parlamento. En el frente económico, Putin ha creado un cuadro leal de oligarcas que hacen negocios con los extranjeros.

El ex operador de la KGB puede decir que Rusia ya no es moldeada por la ideología comunista. Sin embargo, tras bambalinas, el putinismo combina el control político autoritario y el capitalismo de amigos para conseguir un férreo dominio del poder.

En un ensayo escrito en Rusia y publicado en abril de 2012, el economista Deepak Lal describió esta mezcla de ganancias para los políticamente correctos y represión para el resto. El artículo, publicado en el diario indio Business Standard explicó que "la acumulación tradicional de ganancias ha sido criminalizada". Lal aludió al trabajo del abogado ruso Vladimir Radchenko y escribió que "hay tres millones de pequeños y medianos empresarios en la cárcel por crímenes económicos".

Putin estaría, según algunos, planeando formar su propia guardia nacional, escribió Lal. El Servicio Federal de Seguridad está más interesado en gestionar empresas que en perseguir a los disidentes y los rufianes contratados para hacer esa labor son poco confiables. Lal también describe brevemente la renovada alianza entre el Estado y la Iglesia Ortodoxa.

La visita este mes a las oficinas de The Wall Street Journal en Nueva York de Jorge Luis García Pérez Antúnez, un ex prisionero político cubano, me recordó los paralelos entre la Rusia de Putin y las promesas castristas. Este afro-cubano de 48 años, que pasó 17 años en las cárceles del régimen, cataloga las supuestas reformas económicas y políticas como un "fraude".

Antúnez caracteriza la oposición al régimen como generalizada y creciente. No es más visible, asegura, debido a que la "cultura del miedo", sigue siendo intensa. Los informes independientes desde la isla indican que las detenciones y los asaltos violentos contra los grupos opositores han ido en aumento.


Cuba, al igual que Rusia, ya no puede depender de las fuerzas armadas para controlar a los detractores del gobierno. Están ocupados administrando lucrativos negocios de turismo, ventas minoristas, fabricación de cigarros y viajes aéreos. Los Castro también parecen tener una relación "a la Putin" con la Iglesia. El papa Benedicto se reunió con los Castro durante su visita de 2012, mientras que los disidentes que pedían una audiencia con el pontífice eran enviados a la cárcel.

Antúnez dice que permitir que los cubanos gestionen microempresas no está reduciendo la pobreza. Tal vez la razón sea que cuando los emprendedores han sido exitosos durante períodos anteriores de liberalización, el régimen los ha acusado del crimen de enriquecimiento ilícito.


Los inversionistas extranjeros a veces no parecen correr mejor suerte. En una carta enviada a la revista Economist fechada el 13 de agosto, el empresario británico Stephen Purvis, un ex socio de negocios del régimen, describió las circunstancias en torno a su encarcelamiento en Cuba durante 15 meses, entre 2011 y 2012.

Purvis dice que fue "acusado de muchas cosas, comenzando con la revelación de secretos de Estado", pero, al final de cuentas, fue sentenciado por "violaciones de las regulaciones financieras", a pesar de que el banco central cubano "había aprobado específicamente las transacciones en cuestión durante 12 años".

Estuvo en prisión con "un puñado" de otros hombres de negocios extranjeros y sostiene que "hay muchos más en el sistema de lo que se cree". A unos pocos se les acusa de corrupción, escribió, pero muchos afrontan cargos de "sabotaje, perjuicio a la economía, evasión de impuestos y actividad económica ilegal".

A los que no vio en la cárcel fueron los empresarios de Brasil, Venezuela y China en la isla. "¿Por qué está en prisión el representante de Ericsson por exactamente las mismas actividades que su competidor chino, que no lo está?", preguntó. Los extranjeros que hacen negocios en Rusia han descrito reglas de juego similarmente arriesgadas.

En mayo, el disidente cubano Guillermo Fariñas, quien dice tener contacto con una serie de militares cubanos que fueron compañeros de colegio, le indicó al Miami Herald que están estudiando el "putinismo" para prepararse para una transición. "No quieren correr la misma suerte que los seguidores de Gadafi", aseveró.

El modelo de Putin puede ser la forma de evitar esa suerte. Pero dista mucho de ser un plan para liberar a Cuba.


Escribir a O'Grady@wsj.com
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ALGUNOS COMENTARIOS DEJADOS

// Cierto, no tenemos recursos "fáciles" // Siempre muy valiosos los aportes del compatriota Luzárraga. Lástima que no tengamos (todavía... estoy trabajando en eso tanto como puedo) un buen centro para publicación elegante **y discusión efectiva** en Internet. Sería excelente tener a Luzárraga participando en él. Saludos

Ricardo E. Trelles


1 Comments:

At 11:56 p. m., Anonymous Ricardo E. Trelles said...

// Cierto, no tenemos recursos "fáciles" //

Siempre muy valiosos los aportes del compatriota Luzárraga. Lástima que no tengamos (todavía... estoy trabajando en eso tanto como puedo) un buen centro para publicación elegante **y discusión efectiva** en Internet. Sería excelente tener a Luzárraga participando en él.

Saludos.

 

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