lunes, agosto 05, 2019

Waldo Acebo Meireles con una breve historia del embargo; medida de respuesta del gobierno de EE.UU. por el robo de las propiedades norteamericas en Cuba por parte de la tiranía Castrista que no justifica la gran carencia de productos agrícolas cubanos ni el comercio con el resto de los países del mundo pues la tiranía puede comerciar con el resto del mundo

Nota del Bloguista de Baracutey Cubano

El único bloqueo que existe en Cuba es el de la tiranía Castrista  a la liberación  de las fuerzas productivas para aprovechar  el ingenio y las capacidades laborales y empresariales  del  pueblo cubano.

El  embargo norteamericano a la tiranía Castrista es una  medida de respuesta del gobierno de EE.UU.  por el robo de las propiedades norteamericas en Cuba por parte de dicha tiranía. El Embargo no justifica, de ninguna manera,  la  gran carencia de productos  agrícolas y pecuarios  que tradicionalmente se cultivaban o se criaban en Cuba,  así como los  productos del mar que se pescaban  en aguas cubanas y de otros mares cercanos. La siguiente tabla extraida del libro, escrito en 1957, del comunista Oscar Pino Santos lo refleja en cierta medida:



Según el economista y comunista Oscar Pino Santos en su  librito La penetración del Imperialismo norteamericano en la economía cubana, escrito en 1957, el 25 % de los alimentos que consumían los cubanos, siendo Cuba un país agrícola,  eran importados;  con el Castrismo  se ha llegado hasta a importar el 80% de los alimentos. Lo que no dice ese economista comunista que murió en el 2005 trabajando en el Consejo de Estado es que esa importación se debía en gran parte no por  ineficiencia económica del país, como ocurre desde hace  casi 60 años,  sino por distintas razones; veamos algunas: 

1) Resultaba mucho más barato comprar, por ejemplo,  el arroz en los EE.UU., en los Estados de la cuenca del Mississipi, que cultivarlos en Cuba; con otros cultivos sucedía lo mismo. Era más barato comprar en EE.UU. la manteca de cerdo, la cual apenas se consume en los EE.UU.pero que era entonces de consumo tradicional en Cuba, que producirla en Cuba o producir aceites vegetales.

2)  En Cuba se intentó  por los años 20s y 30s cultivar trigo, sobre todo en las provincias centrales, pero no dió resultado, luego la harina de trigo, fundamental para hacer panes, galletas, confitería, etc., se tenía que comprar en el exterior cubano  y así otros productos que eran de consumo tradicional del cubano. 

3) Finalmente, los cubanos  estábamos acostumbrados a consumir bacalao de Noruega, tasajo uruguayo (en Cuba estaba prohibida la matanza de ganado caballar),  al igual que la mantequilla holandesa, quesos franceses y suizos, turrones, jamones y vinos  españoles, peras, manzanas, melocotones, albaricoques enlatados de EE.UU., calamares y sardinas españolas, etc. .En resumen:  Los cubanos éramos un poco sibaritas  dentro del alcanze que tenían nuestros bolsillos y nos gustaba darle gusto al paladar, aunque los alimentos y bebidas fueran exóticos


Con relación a la mencionada dieta tradicional del cubano, en cuanto a alimentos y cantidad, puede consultarse, por ejemplo, la obra El Ingenio del destacado historiador cubano (ya fallecido) Manuel Moreno Fraginals, donde aparece la dieta alimenticia de los esclavos en la Cuba colonial, la cual nos haría morir de envidia cuando la comparamos con la ofrecida por la Libreta de (des)Abastecimiento. En el libro de María Poumier Apuntes sobre la vida cotidiana en Cuba en 1898, muy poco tiempo después de finalizada la devastadora Guerra de Independencia, guerra comenzada en 1895 se lee:

En cuanto a los alimentos proporcionados por el dueño del ingenio a sus peones, eran más o menos los que se comían en todo el campo cubano. En Guabairo, las raciones diarias se componían de: 1 libra de carne limpia o su equivalente en tasajo, bacalao;1 libra de arroz o su equivalente en frijoles, arvejas, macarrones, etc. ; 2 onzas de manteca; 1 onza de café; 2 onzas de azúcar; 6 onzas de pan, o en vez de pan, boniatos, plátanos o malanga; aceite de comer, tocino, sal y especias suficientes para sazonar el alimento. Durante los meses de invierno se les daba coles, tomates y nabos, todos los días además de las raciones.”

Antes de 1959, Cuba sobrepasaba en un 10% los límites mínimos de calorías que planteaba la FAO, pues los cubanos consumíamos como promedio 2500 calorías por habitantes al día; debo aclarar que esas calorías no se alcanzaban como hoy, tomando “agua con azúcar” también llamada "sopa e'gallo" y en el presidio y en las Escuelas en el Campo como "milordo" .

Con relación al consumo de proteínas diré que antes de 1959 los cubanos teníamos el tercer mayor consumo de proteinas en el Continente Americano. Habían alimentos fuentes de proteínas “para todos los bolsillos”, desde los costosos mariscos hasta el picadillo de res, el bacalao, el tasajo y los recortes de tasajo que estaban al alcance de los más humildes; el hueso de res para la sopa, antecedente de las emergentes “pastillitas” de hoy, lo daban gratis en la carnicería.

Por otra parte,   dicha dictadura totalitaria puede comerciar  con el resto de los países del mundo.  No olvidemos que por el artículo 18 de la actual Constitución,  el Estado castrista  es el único autorizado para importar y exportar. El Embargo se ha  ido aflojando con el tiempo por parte del gobierno de los EE.UU. hasta el punto que  la tiranía tiene a los EE.UU como uno de sus principales socios comerciales. siempre que pague al contado.  Un ejemplo de lo anterior está reflejado en la siguiente  tabla.

 La incidencia mayor del Embargo sobre la tiranía Castrista es que  no permite que los círculos financieros de EE.UU. inviertan o presten dinero  a la dictadura, la cual se ha caracterizado por no pagar sus deudas, lo cual es bien conocido por Rusia, el Club de Paris, etc. y en usar  parte  de  ese dinero para la represión dentro de cuba  y  para sus cuentas personales en el exterior.

Para no caer en ingenuidades ni manipulaciones  en cuanto a la parte política del diferendo entre el gobierno de los EE.UU. y la dictadura totalitaria Castrista,  les sugiero que lean mi artículo y el artículo de César Reynel Aguilera que les  agrego al final del  artículo de WaldoAcebo Morales.
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Una breve historia del embargo

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El embargo ha sido el justificante de todas y cada una de las vicisitudes por la que atraviesa el pueblo cubano
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Por Waldo Acebo Meireles
Miami
05/08/2019

 Tenemos que comenzar por un rápido análisis semántico, que sospecho que va a ser fútil, la palabra bloqueo según el diccionario de la Real Academia Española significa acción y efecto de bloquear y este a su vez se define como realizar una operación militar o naval consistente en cortar las comunicaciones de una plaza, de un puerto, de un territorio o de un ejército. Por tanto, dicha palabra solo tuvo una relativa y breve aplicación en Cuba cuando la Crisis de los Misiles, la de Octubre o del Caribe según quien la esté mencionando.

Definido bloqueo pasemos a embargo. Según la mencionada Academia embargo proviene de embargar y este significa prohibición del comercio y transporte de armas u otros efectos útiles para la guerra, decretada por un gobierno. Visto todo lo anterior, aunque ninguno de los dos términos se ajusta exactamente al fenómeno que trataremos de analizar. El que más se le acerca es el de embargo y de ninguna manera el de bloqueo.

El diferendo entre EEUU y el gobierno instalado en Cuba en 1959 comenzó prácticamente desde ese mismo mes de enero, y llegó a un punto álgido al dictarse la ley de Reforma Agraria que afectó decenas de intereses norteamericanos a los que les fueron expropiadas las tierras[1], el diferendo fue en ascenso[2].

Mientras el diferendo se agudizaba Cuba de alguna forma patrocinó el desembarco de tropas integradas por ciudadanos de varios países, incluyendo a cubanos, que habían salidos desde el muelle de Batabanó en abril de 1959[3] y en junio se produce la también fallida invasión a Santo Domingo en la cual sí fue evidente el patrocinio cubano, Camilo Cienfuegos participó activamente en el reclutamiento y entrenamiento de las tropas invasoras.

Por otra parte, cada vez se hacía más evidente que, aunque continuamente afirmaban que no eran comunistas, la penetración de los miembros del PSP en las distintas esferas del gobierno se acrecentaba[4] y los sectores moderados eran apartados del poder[5], así como los grupos que habían luchado con las armas contra Batista[6] eran disminuidos y prácticamente tratados como de tercer orden.

Mientras se daban estos pasos internamente en el exterior se comenzaban los contactos con la URSS contactos que van a llevar al inicio de la crisis del petróleo[7]. Por un convenio de 1938 Cuba compraba el petróleo a las compañías norteamericanas se los entregaban en La Habana y Santiago de Cuba para que fuese refinado por esas mismas compañías, pagaba por este servicio y se lo vendían a las mismas para ser distribuido. Este complicado acuerdo era la base para que Cuba legalmente pudiese comprar petróleo en otro mercado y entregarlo para su refinación.

Cuba compraba el petróleo a poco menos de tres dólares el barril y la URSS le propuso la venta a poco más de dos dólares, es decir que Cuba se beneficiaría en unos 60 centavos por barril, lo cual no estaba mal, lo único es que las compañías que lo refinarían —ESSO, Texaco y Shell— perderían dinero con ese arreglo además de tener que adecuar sus refinerías a ese tipo de petróleo diferente al que habitualmente refinaban. Lógicamente esas compañías se negaron a ese arreglo.

Pero la pregunta es cómo Cuba pondría en juego su cuota azucarera[8] en EEUU la cual le permitía vender sus azucares a casi el doble del precio en el mercado mundial y con un 20 % de descuento en los aranceles de entrada. Esa ecuación no tiene sentido salvo que su propósito sea político y no económico de esta forma se concretaba la línea de pensamiento que tanto daño ha causado al pueblo a lo largo de los años en el cual los criterios ideológicos están por encima de los económicos[9].

En la escalada iniciada el próximo paso fue el 28 de junio de 1960 se dicta la Resolución 166 con la cual se intervienen las refinerías la cual es completada con la Ley No. 851, del 6 de julio de 1960 por la que se nacionalizaban las compañías norteamericanas, sin embargo la misma no se da a la luz de inmediato, la decisión es darle un mayor impacto político y para ello se convoca el Primer Congreso Latinoamericano de Juventudes y en su clausura el 6 de agosto, en el Estadio del Cerro[10], Castro le da lectura al documento, lo cual tiene que interrumpir por una breve afonía, y al leer el nombre de las empresas nacionalizadas los más de 50 mil habaneros y unos pocos cientos de latinoamericanos gritaban: “Se llamaba” expresando esa mezcla de amor-odio que sienten los cubanos por los yanquis. Fue un golpe político.

Aunque la resolución original solo incluía 26 entidades, inmediatamente le fueron anexadas todas las compañías extranjeras, incluyendo el Hotel Hilton que era regenteado por esa compañía, pero era propiedad del Sindicato de Trabajadores Gastronómicos. El valor de las compañías nacionalizadas se ha calculado entre $1.500-1.800 millones de esa época alrededor de $15 mil millones en la actualidad.

El presidente norteamericano Dwight D. Eisenhower redujo la cuota de 3 millones a 700 mil toneladas como lógica respuesta, eso era de esperar y eso es lo que Castro esperaba, para agudizar la crisis ya claramente iniciada entre el gobierno de Cuba y el de EEUU, era el antimperialismo en su estado puro: David enfrentado a Goliat con todo el romanticismo que ello conlleva.

La URSS se comprometió a comprar todo el azúcar que los imperialistas no comprasen, pero con un pequeño inconveniente pagarían el azúcar al precio del mercado mundial, por tanto, teníamos en la mano un triunfo político y una pérdida económica extremadamente significativa para el país.

Ante las demandas del gobierno norteamericano para compensar las empresas nacionalizadas Cuba dio su respuesta: Cuba entregaría a esas empresas bonos amortizables en 20 años con un interés anual no mayor 4,5 %, lo cual no estaba mal, pero con un pequeño añadido “la amortización de dichos bonos y como garantía de los mismos se formará por el Estado cubano un fondo que se nutrirá anualmente con el veinticinco por ciento (25 %) de las divisas extranjeras que correspondan al exceso de las compras de azúcares que en cada año calendario realicen los Estados Unidos de Norteamérica sobre tres millones (3.000.000) de toneladas.”[11]

Es decir que jamás serían pagados, al no ser que EEUU benévolamente y para proteger los intereses de las petroleras no solo le reintegraría la cuota a Cuba, sino que además la incrementaría anualmente, semejante propuesta o era una burla o padecía de una ingenuidad[12] no acorde con las proclamas antimperialistas y el entusiasmo prosoviético.

Eisenhower ordenó a la CIA organizar un grupo armado para derrocar al gobierno que estaba creando una amenaza comunista a 90 millas de las costas norteamericanas, en medio de una situación de tensa Guerra Fría a nivel internacional. Torpe decisión que heredó meses después John F. Kennedy.

El 20 de octubre de 1960 EEUU prohíbe las exportaciones a Cuba, con excepción de algunos alimentos, medicinas y suministros médicos y el 16 de diciembre de 1960, finalizando su presidencia, Eisenhower cancela lo que restaba de la cuota azucarera cubana en el mercado norteamericano.

La crisis se expresó diplomáticamente en un continuo ir y venir de notas diplomáticas hasta la del 2 de enero de 1961 en el cual el gobierno de Cuba exigió la reducción del personal diplomático a 11 personas, casual y curiosamente esa es la cantidad que actualmente permanecen en la Embajada. La respuesta de EEUU fue terminar las relaciones diplomáticas el día 3 de enero de 1961.[13]

El 3 de febrero de 1962 la administración Kennedy anuncia el embargo total del comercio con Cuba que será efectivo a partir del día 7 del propio mes, el embargo incluye todos los productos o tecnologías que se hayan originado en EEUU, de igual forma quedaba prohibido la importación de productos de origen cubano. Previamente Kennedy mandó a realizar una compra considerable de tabacos cubanos (habanos) para su uso personal.

La respuesta de Cuba fue organizar o incrementar su apoyo a los movimientos guerrilleros que han comenzado a florecer en Centroamérica y en Venezuela que tomaron como ejemplo el proceso que culminó en Cuba en 1959, por otra parte, se fueron estrechando aún más los lazos políticos, económicos y militares con la URSS.

A su vez, después del fracaso de Bahía de Cochino, la administración Kennedy aprueba en noviembre de 1962 la Operación Mangosta como un complejo conjunto de operaciones que tendría como objetivo derrocar el gobierno de Cuba esta operación a cargo del General Edward Lansdale incluía al Consejo de Seguridad Nacional en el que intervenían el Pentágono, el Departamento de Estado, la Agencia Central de Inteligencia de EEUU y la USIA, desde el punto de vista económico la operación recrudecía las sanciones contra las compañías no norteamericanas que comerciasen con Cuba.

La presencia militar de Cuba en los conflictos de 1963 en Argelia; también en 1963 en Venezuela; en 1964-65 en la crisis del Congo, 1966 en Bolivia, 1973 Guerra del Yom Kipur; 1975 Angola no facilitaron un mejoramiento de las relaciones entre Cuba y EEUU, sin embargo al iniciarse la administración de James Carter en enero de 1977 la misma comenzó a dar pasos para regularizar las relaciones con Cuba y aliviar las limitaciones que el embargo estadounidense había impuesto, el 12 de mayo se autorizan los vuelos chárter[14] hacia Cuba y el 3 de junio de 1977 ambos países acuerdan la apertura de sendas oficinas de intereses en La Habana y Washington. El 22 de diciembre Carter permite remesas de hasta $500 de cubanos residentes en EEUU a sus familiares en la Isla.

El evidente mejoramiento de las relaciones al parecer no fue del agrado de la alta jerarquía del gobierno cubano lo cual desembocó en el Mariel y el envío de miles de convictos, exconvictos, enfermos mentales y elementos delincuenciales que fueron embutidos en las naves que costeadas por los cubanos en el exilio iban a buscar a familiares y amigos en Cuba. Se iniciaron los tristemente célebres “mítines de repudio”. Los órganos ideológicos del partido comunista cubano pretendían denostar a Carter llamándolo “el manisero” manera muy inteligente de establecer relaciones cordiales con una administración que intento mejorar acercarse a Cuba. La crisis de Irán más la del Mariel desempeñaron un papel negativo en los intentos de reelección de Carter.

La brillante política numantina del líder cubano encontró los resultados esperados en las siguientes administraciones que recrudecieron las medidas que habían sido aflojadas por Carter, el momento más crítico de este recrudecimiento se producirá con la aprobación por el Congreso de EEUU de la llamada Ley Helms-Burton[15], pero en realidad los años 80 y los 90 no vieron grandes cambios en la política de EEUU, incluso para 1991 el gobierno norteamericano dejó de considerar a Cuba como una amenaza, la CIA concluyó que el gobierno cubano no tenía la posibilidad ni el interés de continuar con sus aventuras extraterritoriales, después de la retirada de las tropas de Angola[16], los apetitos intervencionistas de la alta jerarquía cubana sin el apoyo del desaparecido campo socialista estaban saciados.

Sin embargo, en Cuba se mantenía una histeria bélica esperando una invasión que nunca llegaba, las movilizaciones en los 80 y 90[17] fueron un elemento propagandístico que no desempeño un papel positivo para ningún intento de acercamiento diplomático con el poderoso vecino que los amenazaba continuamente con un ataque artero pero que sería fácilmente derrotado cavando refugios y preparándose para la “guerra del todo el pueblo”. La “Operación Tormenta del Desierto” en 1990-91 en la que fuerzas conjuntas de EEUU y una coalición de países derrotó rápida y fácilmente a las tropas iraquíes en Kuwait sembró el pánico entre las capas medias de la oficialidad de las FAR e impulsó aún más la fiebre belicista del gobierno cubano.

A pesar de todo este crispamiento la administración Clinton comenzó una serie de avances para normalizar las relaciones con Cuba, mientras que en el Congreso mantenía una actitud más beligerante hacia el gobierno cubano. Ejemplo de ello fue la aprobación por ambas cámaras de la Enmienda Mack que el Presidente George H. W. Bush se negó a firmar por su carácter extraterritorial, y la Ley Torricelli de 1992[18] que vetaba a las subsidiarias de compañías norteamericanas el comerciar con Cuba, y limitaba los envíos de dinero y viajes a Cuba.

Es difícil discernir si fue “el maleconazo” u otro impulso voluntarista y provocador de la alta dirección cubana el que dio paso a la “Crisis de los Balseros” en 1994 que dejó como inmediata consecuencia la declaración oficial del gobierno norteamericano que la próxima vez que Cuba abriese sus fronteras sería considerado por EEUU como un acto de guerra y por tanto recibiría la respuesta correspondiente. Además Clintón redujo a cuatro los vuelos chárter y estableció nuevos límites a los envíos monetarios a Cuba, y finalmente estableció la llamada política de “pies secos-pies mojados” la cual el gobierno cubano llamó asesina, al parecer prefería la anterior.

Pero el momento culminante y dramático de esta confrontación llegó el 24 de febrero de 1996 cuando un MiG-29UB y un MiG-23 armados con cohetes aire a aire derribaron dos inermes avionetas Cessna Skymaster de Hermanos al Rescate, ninguna razón de defensa justificaba la orden de derribo dada personalmente por Raúl Castro. Este luctuoso y terrible hecho prácticamente obligó a Clinton el 12 de marzo a firmar la Ley Helms-Burton que llevaba días para su firma y no lo había realizado, sin embargo, dejó pendiente los Títulos III y IV.

La administración de George W. Bush tenía bastantes cosas para ocuparse después del ataque del 9/11 para dedicarle tiempo a un tema de poca envergadura como era el de las relaciones con Cuba sin embargo autorizó desde finales de 2001 la venta de alimentos y otros artículos a Cuba, lo cual se ha mantenido hasta la fecha.

Es con la llegada a la Casa Blanca de Barack H. Obama que se recomienza un acercamiento del gobierno norteamericano hacia Cuba con la apertura de conversaciones secretas efectuadas a partir de 2013 en Ciudad Vaticano y Canadá que culminó con la liberación de los cinco espías el 17 de diciembre de 2014 a cambio, aunque ha sido negado múltiples veces, liberaron a Alan P. Gross, en lo que fue un intercambio desigual al cambiar cinco espías condenados como tales por un jurado con todos los beneficios dados a los acusados por el sistema de justicia norteamericano, lo cuales fueron entregados gorditos y sanitos a cambio de un supuesto espía condenado por un sistema judicial en el cual las condenas están establecidas de antemano y que fue entregado demacrado, macilento, enfermo y sin dientes.

Ese día Obama realizó una amplia declaración en la que entre otras cosas dijo:

“Un futuro de más paz, seguridad y desarrollo democrático es posible si trabajamos unidos, no para mantener el poder, no para proteger los intereses creados, sino para promover los sueños de nuestros ciudadanos.”

Todo su mensaje proponía esperanzas, era una proyección hacia un mejor futuro para ambos pueblos.

Por su parte R. Castro realizó lo que ellos llamaron alocución nombre apropiado ya que según la Real Academia es “Discurso o razonamiento breve por lo común y dirigido por un superior a sus inferiores, secuaces o súbditos”. Fue más que breve y en nada se correspondió al mensaje de Obama, en primer lugar y para mantener el tono de dictador militar lo realizó de completo uniforme con todas las medallas ganadas en no sé qué guerras y además de vanagloriarse del retorno de los espías, entre las pocas, y no trascendentes, cosas que dijo, señaló:

“Aunque las medidas del bloqueo han sido convertidas en Ley, el Presidente de los Estados Unidos puede modificar su aplicación en uso de sus facultades ejecutivas.”

Es decir que le orientó a Obama lo que tenía que hacer, aunque aceptó que era una ley y por tanto el presidente no estaba en capacidad de modificarla, fue un mensaje hacia el pasado, un discurso ideológico.

La administración de Obama tomó medidas como aumentar el límite de las remesas trimestrales de $500 a $2.000; incrementó los bienes y servicios exportables hacia Cuba; autorizó las importaciones desde Cuba por los viajeros hasta $400; autorizó la utilización de tarjetas de débito y crédito emitidas por bancos norteamericanos; facilitó formas de financiación de las compras de Cuba en EEUU; autorizó las ventas de hardware y software; aprobó las visitas de ciudadanos norteamericanos en una amplísima gama de categorías; sacó a Cuba de la relación de países patrocinadores del terrorismo; y otras muchas medidas beneficiosas, para los cubanos.

Qué hizo Cuba: nada, ya que de acuerdo a su pensamiento estancado en una ideología que no ha funcionado, que no es un vehículo para el desarrollo, ellos nada tienen que hacer, nada tienen que cambiar, nada tienen que mejorar. ¿Es posible negociar con un país que no ofrece nada a cambio de lo que le ofrece la otra parte?

Al discurso de Obama en La Habana la respuesta se la dejaron al decrépito líder que redactó un largo, tedioso, incoherente, clavado en el pasado, divagando e incluso irrespetuoso al llamarle a Obama ‘Brother’, que concluyó con una frase antológica:

“Advierto además que somos capaces de producir los alimentos y las riquezas materiales que necesitamos con el esfuerzo y la inteligencia de nuestro pueblo.”

Concordemos que él hizo sus mayores esfuerzos para evitarlo por todos los medios que se le ocurrió.

No habían pasado muchas semanas desde la reapertura oficial de la Embajada de EEUU el 14 de agosto de 2015 cuando al parecer comenzaron los llamados “ataques sónicos” que afectaron a 40 funcionarios norteamericanos y a media docena canadienses, hasta el momento no hay una respuesta a qué fue lo que pasó y cómo pasó, pero las pruebas científicas han dejado muy en claro que esos funcionarios sufrieron daños cerebrales[19], las consecuencias de ello, además de las afectaciones a esas personas, fue la retirada del personal diplomático con todas las afectaciones que de ella se han derivado para los cubanos.

Por otra parte, la administración Trump se ha dado a la meticulosa tarea de desarmar todas las medidas tomadas por la administración anterior —la única que seguramente no hará es la de restablecer la política de “pies secos/pies mojados” ya que no se ajusta a su política anti-inmigrante— incluso poniendo en vigor los Títulos III y IV de la Ley Helms-Burton, cosa que ninguna administración anterior había hecho. El gobierno cubano logró sus objetivos: la confrontación, entre más fuerte mejor.

El embargo ha sido el justificante de todas y cada una de las vicisitudes por la que atraviesa el pueblo, el culpable de todos los fracasos de los experimentos en la ganadería y la agricultura, el motivo de todas las aventuras belicistas e intervencionistas en América Latina y en el África en resumen el chivo expiatorio del fracasado sistema que se implantó por un líder obcecado que se prometió a si mismo que su destino era la confrontación con EEUU.

En la historia universal no hay un ejemplo de una ideología que haya generado tanto costos humanos como la que sufre Cuba, incluso una ideología tan tenaz e inamovible como la del Apartheid[20] en Sudáfrica llegó a pactar y eliminar las trabas que limitaban el desarrollo económico y social de la mayoría de la población no blanca, liberó a Nelson Mandela, destruyó sus armas nucleares y realizó elecciones libres, amplias y democráticas obteniendo la presidencia el mismo Mandela que por 27 años fue un prisionero político.

Al parecer las ideologías de izquierda son más torpes y tercas y reciben más apoyo de los que no viven bajo ella que las de derecha.

[1] La United Fruit fue una de las afectadas al serle expropiadas 95k hectáreas equivalentes a 7.100 caballerías, esta compañía ahora llamada “Chiquita” al serle expropiadas tierras en Guatemala en 1954 fue el motor impulsor del golpe de estado contra Jacobo Arbenz dada su vinculación con el Secretario de John Foster Dulles y su hermano Allen W. Dulles Director de la CIA en esos momentos.

[2] Se calcula que el total de las tierras expropiadas, a entidades norteamericanas incluyendo las de los centrales azucareros rebasó 675k hectáreas, alrededor de 50k caballerías lo cual influyó en los problemas iniciales de la industria azucarera y ganadera.

[3]http://laestrella.com.pa/opinion/columnistas/ruben-miro-invasion-cubanos-panama/23701606

[4] Por ejemplo al Asociación de Jóvenes Rebeldes fundada en agosto de 1959 estaba nominalmente presidida por el joven comandante del Ejército Rebelde Joel Iglesias, en realidad estaba bajo el control del máximo dirigente de la rama juvenil del PSP Joel Domenech.

[5] El presidente, puesto de dedo costumbre inaugurada en 1959, Manuel Urrutia fue separado del cargo y prácticamente acusado de traición, igual destino tuvo el primer Ministro Roberto Agramonte.

[6] Nos referimos al Directorio Revolucionario y al Segundo Frente del Escambray.

[7] Un primer intento de generar esta crisis ocurrió cuando en enero de 1959 Fidel Castro visitó Venezuela y recibió un regaño del Presidente venezolano Rómulo Betancourt por haber desembarcado armados, Castro nunca se lo perdonó, sin embargo se acordó adquirir petróleo venezolano pero las navieras de tanqueros en manos norteamericanas se negaron a transportarlo.

[8] La cuota para 1959 era de 3.215 toneladas la cual se había incrementado en un 12,4 % desde 1955, el precio en el mercado mundial era de 21,40 ctvs por libra y a Cuba se le pagaba 43,26 ctvs, para más información: The U.S. Sugar Program and the Cuban Revolution de Alan Dye y Richard Sicotte y An Economic History of the United Satates Sugar Program de Tyler James Wiltgen

[9] El contenido ideológico de la posición adoptada queda reflejado en el siguiente fragmento de un discurso de F. Castro: “Nos quitaran las cuotas, ¡pero con las cuotas que nos quiten tendrán que acabarse de arrancar la careta de explotadores y enemigos de la humanidad!, nos quitaran las cuotas, ¡pero con las cuotas tendrán que arrancarse para siempre la simpatía del pueblo de Cuba!, nos quitaran las cuotas, ¡pero con las cuotas no podrán quitarnos la vergüenza y la dignidad con que estamos dispuestos a morir en nuestra tierra”.

[10] Es a partir de ese momento que se le empieza a llamar “Latinoamericano” o popularmente “latino”.

[11]www.cubavsbloqueo.cu/es/genesis/el-proceso-de-expropiacion-e-indemnizaciones-en-cuba

[12] Cuba ha intentado infructuosamente poner a los empresarios norteamericanos en contra de su gobierno en más de una ocasión la última que recuerdo, y es un ejemplo de ello, fue la reducción en la compra de pollos a EEUU en 2015, en un 26,3 % en valor, que lo que buscaba era influenciar a los productores norteamericanos para que abogaran por una reducción o eliminación de las restricciones del embargo, entonces les compraron los pollos a Brasil a mayor costo y con mayores gastos en transportación, al año siguiente se aconsejaron y no compraron más pollo en Brasil.

[13] Ver: https://history.state.gov/historicaldocuments/frus1961-63v10/d7

[14] El inicio de los llamados vuelos de la ‘Comunidad’ tuvo un efecto de choque en la población cubana al comprobar que ni los médicos manejaban ascensores ni los ingenieros lavaban platos.

[15] Cuban Liberty and Democratic Solidarity (Libertad) Act.

[16] En Angola los cubanos se vieron por segunda vez, la primera fue en la Crisis de Octubre, al borde de sufrir un ataque con armas atómicas, los pilotos sudafricanos estaban dispuesto a usar las armas atómicas de carácter táctico si las tropas invadían su territorio, faltó muy poco.

[17] Cabe notar que en las décadas del 70-80’ recibiendo toda la ayuda soviética y con acuerdos muy favorables en el CAME el bloqueo ni se mencionaba, pasó a un tercer plano, no fue hasta 1991 que Cuba presentó sus demandas en ONU.

[18] Cuban Democracy Act.

[19]https://www.newyorker.com/news/news-desk/the-mystery-of-what-happened-to-american-diplomats-and-spies-in-havana-deepens

[20] En Cuba también sufrimos del apartheid que no permitía a los cubanos entrar a los lugares reservados para los extranjeros.

© cubaencuentro.com
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RELEVANTES PRUEBAS E INDICIOS DE QUE FIDEL CASTRO Y RAÚL CASTRO RUZ ESTABAN VINCULADOS AL COMUNISMO INTERNACIONAL ANTES DEL TRIUNFO REVOLUCIONARIO DE ENERO DE 1959 Y QUE NO FUERON SUCESOS POSTERIORES AL 1 DE ENERO DE 1959 LOS QUE LOS FORZARON A TOMAR EL CAMINO COMUNISTA


 Salvador Díaz Versón

El periodista Salvador Díaz Versón quién había ocupado un alto cargo policial en uno de los gobiernos auténticos  tenía en su poder los expedientes de la Liga Anticomunista donde  estaban depositados muchos años de  investigación  sobre los comunistas en Cuba y fuera de Cuba. El expediente A-943 correspondía a Fidel Castro Ruz y en él se reflejaba que Fidel  Castro había comenzado a trabajar para la Unión Soviética  en 1943 y que en su reclutamiento y entrenamiento había desempeñado un importante  papel un diplomático supuestamente llamado Gomer Bashirov, En el expediente también habían fotos y documentos que  que evidenciaban su conexión con Moscú. Después del triunfo de la Revolución y concretamente tan cercano como el 23 de enero de 1959  se requisaron los archivos que estaban, si mal no recuerdo haber leido, en la casa de Salvador Díaz Versón en Cojimar.  También creo recordar que esa casa fue la primera casa oficial de Fidel Castro la cual era compartida con una habitación del  Hotel Havana Hilton, Una carta de Fidel Castro dirigida  a Abelardo Adán en Praga que fue interceptada por Salvador Díaz Versón decía: ¨ Nuestro amigo me dijo que me mantiene reservado para mayores esfuerzos  y que no debo quemarme  viajando ahora. Ellos tienen  un plan  en el cual yo seré  el eje que  se implementara muypronto. Es posible  que entonces volvamos a vernos sin temor al imperialismo yanqui¨.  La información de casi todo lo que está en este párrafo están en las páginas 777 y 778 del excelente libro (aunque no coincido en algunas interpretaciones que aparecen en él)  titulado La Verdadera República de Cuba , del Dr.Andrés Cao Mendiguren.

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Sobre la biografía  del dictador Raúl Castro Ruz escrita por  Nikolai Leonov

Por Pedro Pablo Arencibia 
30 de julio de 2015

 Nikolai Leonov sirviendo de traductor entre Nikita Jrushov, Leonid Brezhnev y Fidel Castro cuando Fidel Castro  fue de visita a la URSS después de la Crisis de Octubre para limar asperezas. URSS 1963.

En este mes de julio  de 2015  se presentó en sesión especial de la Asamblea Nacional del Poder Popular de la República de Cuba un libro  biográfico  titulado Raúl Castro, un hombre en Revolución,  escrito por  Nikolai Leonov, ex espía y posteriormente un muy alto oficial de la KGB soviética, pues llegó a ser el segundo hombre de la  KGB. Vladimir Putin no sólo fue su subordinado, Leonov fue su mentor.
No me he leido el libro, pero supongo que en él  no se responden  algunas preguntas sobre Raúl Castro, Fidel Castro y la participación o involucramiento,  o no,  de organismos de  la Unión   Soviética, URSS,  en el ataque al Cuartel Moncada,  el entrenamiento de los futuros expedicionarios  del yate Granma y/o  la compra de ese yate así como la ayuda, de cualquier tipo, a las fuerzas comandadas por Fidel Castro y Raúl Castro, respectivamente, en la Sierra Maestra y en el II Frente Oriental ¨Frank País¨, frente guerrillero  cuya comandancia se encontraba en la Sierra Cristal.

En el artículo Presentan por vez primera en Cuba biografía de Raúl Castro en sesión especial del Parlamento del periodista Enrique Milanés León  se lee:

¨El libro Raúl Castro, un hombre en Revolución, del investigador ruso Nikolai Leonov, tuvo su primera presentación en Cuba, durante una sesión especial de la Asamblea Nacional del Poder Popular, ante los diputados de todo el país que conocieron detalles de la que constituye la primera biografía del presidente cubano.
(Eusebio) Leal realizó un minucioso repaso de la génesis de la obra, desde el encuentro de Leonov con Raúl, cuando en 1953 ambos viajaron, desde Génova hasta Latinoamérica —hacía México, el ruso, y hacia Cuba, Raúl—, en el barco Andrea Gritti, donde nació una amistad que aun se mantiene.¨
(Fidel Benitez Domenech, Nikolai Leonov y Raúl Castro en el buque Andrea Gritti)

El presentador comentó las actividades revolucionarias que ya en esa época llevaba a cabo Raúl, quien cumplió 22 años a bordo de ese propio barco. Coincidencias históricas hicieron que los dos amigos se encontraran y que Leonov pudiera conocer más adelante a Ernesto Che Guevara y a Fidel Castro, ahondando el acercamiento ideológico y personal que había comenzado con Raúl.¨
(Nikolai Leonov como alto oficial del  KGB)

Sin embargo, hay personas calificadas que plantean   que hubo, además de amistad,  otras relaciones entre Leonov y Raúl Castro en los comienzos de esa amistad ; una de esas personas es el ex Teniente General (de dos estrellas; es decir:  General de División) de los servicios de Inteligencia y Contrainteligencia rumanos  Ion Mihail Pacepa, quien desertó a EE.UU. en 1978, siendo el más alto oficiaL del entonces  campo socialista que haya desertado.
 (Ion Mihail Pacepa  en una ceremonia militar en la  Rumanía del dictador comunista Nicolae Ceausescu)
Pacepa en su largo artículo  ¿Quién es Raú;l Castro?, publicado en el año 2006, (Fuente en ingles):

¨Kruschev soñaba con pasar a la historia como el lider sovietico que habia  instalado el comunismo en el continente americano y estaba dispuesto a hacer  todo lo que fuera necesario para hacer su sueño realidad. Pero Kruschev no tenia confianza en Fidel, creia que no tenia nada que ver con el marxismo  Los lideres del partido comunista cubano estaban convencidos de que Fidel  era un peligroso aventurero y la burocracia del partido sovietico tambien estaba renuente a apoyarlo. Pero Kuruschov si tenia confianza en Raul. Segun  Sakharovsky, que habia traido secretamente a Raul a Moscu a mediados de los  años 50, fue un amor a primera vista. Nikita y Raul amaban el vodka. Ambos  estaban fascinados por el marxismo. Ambos odiaban la e scuela, la religion y la disciplina. Ambos se consideraban expertos militares. Ambos estaban obsesionados con el espionaje y el contraespionaje. Y a los dos les gustaba  dormir con las botas puestas. Sakharovsky consideraba que la 'calida  relacion' entre los dos hombres habia convencido a Kuruschev de apoyar decididamente a la revolucion cubana.
(Ion Mihail Pacepa)

Por ordenes de Kruschev, Sakharovsky le habia dado a Raul un asesor de  inteligencia: Nicolai Leonov, el experto en America Latina del PGU. Leonov  (hoy un retirado general de la KGB y miembro de la Duma), le dio a Raul inteligencia sobre las fuerzas militares del dictador Fulgencio Batista, y  lo ayudo con su guerra de guerrillas. En junio de 1957, Leonov le dio  documentos y fotografias mostrando que Washington estaba dando armas a apoyo  logistico a Batista, y sugirio que Raul tomara unos cuantos rehenes  americanos para obligar a Eisenhower a retirarse del conflicto. Raul lo hizo. El 26 de junio de 1958, sus guerrilleros secuestraron a 50 militares y  civiles americanos y canadienses que estaban trabajando en Cuba. Por temor a  la vida de los rehenes, Batista declaro un ceso al fuego. Eso le permitio a  los sovieticos traer nuevas armas a Cuba. El curso de la revolucion cubana  cambio para siempre. Habia empezado la era de los secuestros politicos. El  31 de diciembre de 1958, Batista huyo de Cuba, y los hermanos Castro tomaron  la direccion del pais. Durante los proximos meses, Raul organizo la  ejecucion de cientos de oficiales de la policia y el ejercito de Batista.  Los cadaveres eran enterrados en tumbas colectivas en la afueras de Santiago de Cuba.
(Ion Mihail Pacepa y el dictador comunista rumano Nicolae Ceausescu)

Un año despues, el viceprimer ministro sovietico Anastas Mikoyan aterrizo  en La Habana. Fue recibido por Fidel, Raul y el nuevo asesor de la KGB, Alexander Shitov. La tarea de este ultimo era ayudar a Raul a crear una KGB  cubana y un ejercito estilo sovietico. En 1962, Kruschev dio el  extraordinario paso de nombrar a Shitov como embajador en Cuba. Pronto, Moscu empezo a construir secretamente  bases de cohetes en Cuba. Kruschev,  Raul y Shitov - no Fidel - pusieron el mundo al borde la guerra nuclear.¨

Este bloguista de Baracutey Cubano señala que el espía Alexander Ivanovich Shitov había estado en  América  del Sur con fachada de periodista de la agencia soviética  TASS con el nombre de Alexander Alexeiev; fue embajador de la URSS en Cuba, con ese nombre falso, en los primeros años del Castrismo en Cuba.


 (General Aleksandr Sakharovsky, consejero entre 1949 y 1953  en el establecimiento  de la policía política de Rumania a la que perteneció Pacepa. Entre 1955 y 1970  dirigió la división de Inteligencia exterior de la KGB)

En una síntesis biográfica de Raúl Modesto Castro Ruz de  un sitio de biografías de Internet  se lee algo que puede  avalar o lo planteado por Pacepa, basado en lo que expresó Sakharovsky(General de la KGB, jefe de la Primera Dirección; the organization responsible for foreign operations and intelligence collection activities by the training and management of the covert agents, intelligence collection management, and the collection of political, scientific and technical intelligence) pero haciendo  las observaciones que la expresión  ¨mediados de los años 50s¨ se refiere  a 1953  y que la información de  Inteligencia a Raúl sobre las fuerzas militares de Batista y los documentos sobre las armas y apoyo logístico de EE.UU. a Batista le  fueron enviadas por Leonov a Raúl y no dadas. Algo perfectamente posible pues, por ejemplo,   José ¨Pepe¨ Ramírez Cruz (posteriormente y durante décadas Presidente de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños, ANAP)   que ocupó en la ¨estructura civil¨ del II Frente Oriental una posición dirigente  dentro de  los campesinos, era un experimentado cuadro del Partido Socialista Popular o PSP (nombre del Partido Comunista en esa época) que fue enviado por  la dirección nacional de dicho partido (por cierto: José  Ramírez Cruz no era campesino ni vivía en la zona del II Frente Oriental) y recordemos que los Partidos Comunistas estaban subordinados  a la dirección de la Tercera Internacional o  KOMINTERN (supuestamente  eliminada en 1943) y Raúl Castro ya había ingresado, o estaba en proceso de ingresar,  públicamente  a la organización juvenil de dicho partido. El PSP tenía militantes no públicos en sus filas y en las filas de su organización juvenil.
Veamos un fragmento de la aludida síntesis biográfica de Raúl Castro:

¨Estudió en los colegios de los jesuitas, primero en Santiago de Cuba y luego en La Habana, en cuya universidad empezó una diplomatura en ciencias sociales que no terminó debido a sus actividades políticas. Su compromiso ideológico marxista es anterior al de su hermano Fidel. Afiliado a la Juventud Socialista, organización del Partido Socialista Popular (PSP, de orientación comunista), en febrero de 1953 participó, en Viena, en el Congreso Mundial de la Juventud y visitó varias capitales del bloque soviético
...
...
Tras su liberación, se trasladó a México, donde ayudó a su hermano a captar adeptos y a organizar el movimiento insurreccional. Allí restableció sus relaciones con el agente soviético Nikolai Leonov, quien ejerció gran influencia sobre la incipiente guerrilla. A fines de 1956, Fidel, Raúl y ochenta camaradas zarparon de México en el yate Granma y desembarcaron en la provincia de Oriente. La mayoría de los insurgentes resultaron muertos o fueron capturados por las tropas de Batista, pero los hermanos Castro y doce compañeros lograron huir y refugiarse en la Sierra Maestra para comenzar la lucha que les conduciría a la toma del poder.¨

Se plantea por algunas personas que Fidel y Raúl Castro ya estaban vinculados al Comunismo internacional desde antes del asalto al cuartel Moncada el 26 de julio de 1953 y que, mediante el oficial de la KGB Nikolai Leonov, el comunismo soviético  le brindo  en México ciertos recursos a la preparación y expedición del yate Granma.
En el artículo  Los secretos del general Nikolai Leonov donde el autor Víctor Carrato entremezcla fragmentos del mencionado libro de Nikolai Leonov con observaciones  suyas se lee:

¨En el verano de 1956 me encontré por casualidad con Raúl Castro en México. Fue muy emocionante… Fui el primer soviético que conoció al renombrado compañero “Che”. Le prestó ayuda médica a Raúl y otros compañeros enfermos. Cuando los aspirantes a revolucionarios fueron arrestados en México, en 1956, Guevara fue el único que admitió que era comunista y que estaba estudiando ruso. (Habló abiertamente de su relación con Nikolai Leonov, de la Embajada Soviética).

¿Cuánto hubo de suerte y cuánto de planificación en su trabajo y en su amistad con los cubanos, incluido Raúl Castro?

Yo mantenía en secreto mis encuentros con los revolucionarios cubanos. El Che Guevara me pidió que le buscara unos libros en español. Esos libros eran Chapaev, de Furmanov; Un hombre de verdad, de Boris Polevói, y Así se templó el acero, de Nikolai Ostrovski. Los hallé en nuestra Embajada. Mantuve amistad con el Che Guevara hasta su viaje a Bolivia, donde murió.
Leonov tuvo que salir de México después de que los rebeldes fueron detenidos por la Policía mexicana y se descubrió una tarjeta de presentación de Leonov en un libro que leía Guevara.¨

(Una digresión: el bloguista de Baracutey Cubano se pregunta si el Che Guevara era, supuestamente,  médico ¿ Cuál fue esa ayuda médica a Raúl y a otros compañeros enfermos?)
No obstante, lo verificable, hasta ahora, es  lo siguiente, lo cual se extrajo del ensayo  Razones de Angola IX, de César Reynel:

¨La inteligencia checa, que desde 1948 era incapaz de tomar una sola decisión sin consultar con Moscú, pidió asesoramiento de los soviéticos y recibió respuesta a través de la decisión del Presidium de Comité Central que hoy puede ser consultada en el Archivo del Presidente de la Federación Rusa (Extracto del Protocolo 198, reunión del Presídium de diciembre 27, 1958, folio 3, lista 65, Fichero 871). En esa resolución (que ya está desclasificada y es pública), el PCUS aprobó “la intención de los amigos checos de ayudar al movimiento de liberación en Cuba”, y dio instrucciones precisas de no dejar ningún rastro escrito diciendo que la armas eran para Cuba, que verificaran exhaustivamente la seriedad de las intenciones de la compañía (léase contacto), y que no enviaran ningún arma que pudiera ser rastreada como perteneciente al bloque soviético.

(Fidel Castro, Nikita Jrushov y Emilio Aragonés Navarro  en  la URSS. 1963) 
  
En el  libro¨One hell of a Gamble (The Secret History of the Cuban Missile Crisis) de los investigadores Aleksander Fursenko Timothy Naftali que desde febrero de 1959, según los archivos abiertos de la KGB y la GPU soviéticas, comenzaron los acercamientos a la Unión Soviética iniciados no por Jorge Risquet, que es la versión oficial trasladándolos a fecha posterior, sino por Emilio Aragonés en México. Para el que no tenga ese libro, puede leer el artículo ¨La crisis de octubre y la verdadera historia del año 1959 a la luz de los archivos secretos de la URSS y de los Estados Unidos ¨ de Miguel Ángel Sánchez en la Revista Encuentro número 10 de otoño 1998, donde se analiza en detalles la más relevante información que da el mencionado libro.  No olvidemos que los que abrieron, como excepción y por muy breve tiempo, los archivos de la KGB y la GPU para esos dos periodistas norteamericanos  no son nada ingenuos  y no mostraron ni desclasificaron todo lo que  hay en esos archivos. 
Tampoco olvidemos que los primeros especialistas extranjeros en Inteligencia y Contrainteligencia  que asesoraron a los incipientes órganos de la Seguridad del Estado  después del triunfo de la Revolución fueron los checoslovacos, hispanosoviéticos y ex combatientes  de la Guerra Civil española. Uno de ellos fue Angel Martínez Riosola,   ¨Angelito¨, cuyo verdadero  nombre  era  Francisco  Ciutat de Miguel  quien llegó a Cuba el 4 de  marzo de 1960;  su avión procedía de Venezuela pero antes había recorrido varios países europeos como Checoslovaquia y Bélgica. Era graduado de la prestigiosa Academia  Voroshilov, de la Unión Soviética,  donde también ejerció como profesor. En el 40 aniversario de la invasión de Bahía de Cochinos, recuerdo, aunque ha pasado mucho tiempo,  a Fidel Castro decir en la televisión que  si la invasión hubiera sido por Trinidad,  no tenía ninguna probabilidad de éxito, pues ¨Angelito¨ había hecho fortalecer dicha zona con fuerte artillería y tropas. Se  afirma que participó en combatir a los alzados antiCastristas de la Sierra del Escambray y hasta que fue herido; quizás este ¨asesor¨haya formado parte del grupo operativo especial  ¨Molino¨. Posteriormente ofreció  asesoramiento militar en Vietnam y en Argelia . En Vietnam fue un importante apoyo del General Võ Nguyên Giáp.
Mucho de lo anterior no escapaba a los órganos de Inteligencia de los EE.UU., los cuales tenían informado al Presidente Dwight D. Eisenhower, el cual el 17 de marzo de 1960 aprobó  el documento titulado “Un programa de acción encubierta contra el régimen de Castro”,con el objetivo de derrocar a la amenaza que se establecía a 90 millas de las costas de EE.UU. pese a que su gobierno de manera extraordinariamente rápida había reconocido  la llegada al poder del nuevo régimen en Cuba. No olvidemos que ¨el gobierno de los 100 días¨ (realmente fueron 127 días)  de Ramón Grau San Martín no fue nunca reconocido por los EE.UU. pues Grau se negó a jurar ante el Tribunal Supremo de Justicia y sobre la Constitución de 1901  argumentando  que dicha constitución contenía la Enmienda Platt.
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 Nota del Bloguista de Baracutey Cubano

En el artículo El hombre que tuvo tres nombres, se lee que fue  el comunista Flavio Bravo (era miembro del Partido Socialista Popular o PSP que  era en ese momento  el nombre que tenía el primer partido comunista en Cuba)   la persona que recibió el 4 de marzo de 1960 al importante estratega militar  hispano soviético   Francisco Ciutat de Miguel, también conocido como   Pavel Pablovich Stepanov,  o Ángel Martínez Riosola ¨Angelito¨, quien además de ser teniente coronel durante la Guerra Civil en España (1936-1939)  había  estudiado y posteriormente enseñado en la academia militar más importante de la Unión Soviética.

(De izquierda a derecha:  ¨Angelito¨, Sergio del Valle, Raúl Castro y Raúl Menéndez Tomassevich)

Pero  Angelito no fue el único asesor  militar que llegó de la URSS en ese momento. En  ese artículo el autor cita una entrevista suya con la viuda del ¨Comandante Angelito¨  en la que se lee:

—¿Cree de verdad que Paco se parecía al padre de Fidel?

Yo pienso que esa fue una galantería de su parte, para distinguirlo entre unos diez españoles que integraban este grupo de militares de academia llegado a Cuba como asesores. Lo cierto: Paco y Fidel establecieron muy buenos lazos, tal vez por esa forma de tratar con la gente que tenía mi marido que, aunque nada bien parecido, poseía unos ojos azules magnéticos, preciosos, incapaces de reflejar ira, odio u otro sentimiento parecido.

Uno de esos asesores hispano soviéticos fue el General Enrique Líster Forján  quién fue el que  le sugirió a Fidel Castro  crear los Comité de Defensa de la Revolución  o CDR y dirigió la implantación de la Libreta de (des)Abastecimiento:
Del libro Fidel Castro: Escupiré sobre su Tumba  cuyo autor es Alejandro Prieto Blanco.

¿Alguien cree todavía, por ejemplo,  que las órdenes de Fidel Castro  cuando sucedió el bombardeo de preludio de la invasión de Bahía de Cochinos  así como durante las batallas que  hubo en esa invasión salieron de la cabeza de Fidel Castro?¿Alguien cree que las exitosas estrategias de la Seguridad del Estado en contra de las organizaciones antiCastristas de las ciudades y de los campos cubanos fueron diseñadas por los cubanos que pertenecían a la Seguridad del Estado sin cooperación alguna  de los asesores del campo socialista? En uno de los libros  titulados Las reglas del juego, libro escrito por la Comisión de Historia  de los Órganos de la Seguridad del Estado  y la Dirección Política Central del Ministerio del Interior  por los 30 años de la Seguridad del Estado se lee:


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Tomado de http://www.penultimosdias.com

Razones de Angola (IX)

Fidel Castro con Anastas I. Mikoyan, en una recepción habanera el 8 de febrero de 1960. © Bettmann/CORBIS.

Por César Reynel Aguilera
Montreal
Diciembre  22 de  2010

Amor a primera sombra
Si aceptamos que en el Moscú de 1958 nada sabían de Fidel Castro estamos aceptando, entonces, que la velocidad del noviazgo entre la revolución cubana y la Unión Soviética es equivalente, en términos de política real, a enamorarse de una persona desconocida antes de que doble la esquina.
Si algo caracterizó las relaciones del PCUS y la KGB con los mal llamados líderes del Tercer Mundo fue precisamente la cautela. No existe un sólo caso, en la geopolítica soviética, en que las relaciones con un “movimiento de liberación nacional”, en el poder, hayan ocurrido con la rapidez y profundidad que tuvo el compromiso soviético con el castrismo. En menos de diez y ocho meses los ‘bolos’, que es como los llamamos en Cuba, lograron controlar económica y militarmente una plaza que en las claves de su inteligencia pasó a tener el nombre código de “Cabeza de Playa” (Avanpost).


La explicación de esa penetración tan rápida, profunda e inusual es que los soviéticos sí sabían de la Revolución cubana —mucho más de lo que le conviene reconocer a la versión oficial del castrismo. Ya en octubre de 1958 Nikita Jruschov habló de la “heroica y desigual lucha del pueblo cubano contra la opresión imperialista”. Ese mismo año, en el mes de diciembre, el Presidium del Comité Central del PCUS tomó una decisión en la que es importante detenerse.
Unas semanas antes la embajada Checa en la Ciudad de México recibió la visita de un supuesto representante de la Armería Polini, radicada en San José, Costa Rica. Esa persona, todavía no identificada hoy, solicitó a los checos el abastecimiento de armas, morteros y municiones para las columnas rebeldes de Fidel Castro. Una vez más es importante recordar, y recalcar, que esos contactos no ocurren, ni pueden ocurrir, sin la existencia de vías (caminos) que garanticen la legitimidad de la persona que contacta y minimicen, en lo posible, la posibilidad de una provocación o de un engaño. En Cuba esas vías siempre pasaron, directa o indirectamente, a través del PSP. En 1958, recordemos, ya Fabio Grobart llevaba una década viviendo en Praga y trabajando para la Federación Sindical Mundial, una organización que ya hoy se sabe que fue (al igual que la FMJD) una las fachadas que utilizó la KGB para su trabajo en el exterior.
La inteligencia checa, que desde 1948 era incapaz de tomar una sola decisión sin consultar con Moscú, pidió asesoramiento de los soviéticos y recibió respuesta a través de la decisión del Presidium de Comité Central que hoy puede ser consultada en el Archivo del Presidente de la Federación Rusa (Extracto del Protocolo 198, reunión del Presídium de diciembre 27, 1958, folio 3, lista 65, Fichero 871). En esa resolución (que ya está desclasificada y es pública), el PCUS aprobó “la intención de los amigos checos de ayudar al movimiento de liberación en Cuba”, y dio instrucciones precisas de no dejar ningún rastro escrito diciendo que la armas eran para Cuba, que verificaran exhaustivamente la seriedad de las intenciones de la compañía (léase contacto), y que no enviaran ningún arma que pudiera ser rastreada como perteneciente al bloque soviético.



Una lectura ingenua de esa resolución podría ser que los soviéticos, o la KGB, ante la inminencia del triunfo castrista, decidieron sumarse a la Revolución. La realidad, sin embargo, es que en Cuba, en diciembre de 1958, ni los más optimistas soñaban con la fuga batistiana. Al mismo tiempo, esas operaciones de contacto y solicitud de ayuda no se preparan de un día para otro; lleva meses hacerlo de una forma adecuada y segura. Por último, el hecho de que esa solicitud haya alcanzado el conocimiento del Presidium no significa que otras operaciones similares, y anteriores, no hayan podido suceder sin el conocimiento y la autorización de la política soviética. Si algo enseña la historia de la KGB, después del XX Congreso del PCUS, es que su condición de poder, dentro del poder, le dio un alto margen de libertad a la hora de decidir qué informar y qué no informar.
Con la fuga batistiana el cortejo entre cubanos y soviéticos fue tan intenso, y tan rápido, que no puede ser explicado bajo la ingenua idea del guiño y el tanteo. Tuvo todas las características de un noviazgo ya pactado. En fecha tan temprana como enero de 1959, Alexander Alexeiev, antiguo jefe de la estación de la KGB en Buenos Aires, y funcionario especialista en América Latina de la Comisión de Asuntos Culturales del Comité Central del PCUS, pidió ser enviado a La Habana y su solicitud, a recomendación de Alexander Shelepin, jefe de la KGB, fue aceptada por el Comité Central (Archivo del Presidente de la Federación Rusa: A. Shelepin al Comité Central, Sept. 15, 1959, Folio 3, Lista 65, Fichero 891, p. 1).
Para muchos analistas esta solicitud, y su aceptación, es prueba de la necesidad que tenían los soviéticos de llenar ese supuesto vacío de inteligencia, e información. Desde el punto de vista operativo, sin embargo, ese nombramiento indica exactamente lo contrario. Alexeiev era un cuadro de inteligencia demasiado importante para enviarlo a una situación desconocida. La KGB nunca trabajó así. Alexeiev fue a Cuba porque, entre otras cosas, la inteligencia soviética sabía que a pesar de la situación convulsa, y de las incógnitas que rodeaban la figura de Fidel Castro, existían un grupo mínimo de condiciones que garantizaban la seguridad de su enviado, la discreción de su trabajo y el posible éxito de la misión encomendada. Y así fue; los cubanos tardaron varios meses en extender la visa al enviado de Moscú, pero cuando Alexeiev llegó a La Habana tuvo una seguridad personal garantizada por el aparato de inteligencia del PSP, logró acceso inmediato a Fidel Castro y, sin muchos preámbulos, empezó a despachar sobre la visita de Anastas Mikoyan, la venta de armas y unos convenios de colaboración que incluían millones de toneladas de azúcar y barriles de petróleo.
Cuando Alexeiev llegó a La Habana, el 1 de octubre de 1959, lo hizo muy bien informado; ya el 26 de febrero de ese mismo año se había reunido con Severo Aguirre en Moscú (Centro de almacenamiento de la documentación contemporánea. Reunión de Alexander Alexeiev con el miembro de PSP Severo Aguirre: Feb. 26, 1959, Folio 5, lista 50, fichero 174, pág. 7). De esa reunión la alta jerarquía soviética supo, por boca de un representante del círculo político del PSP, que el Partido merecía ser reconocido por el triunfo de la revolución, sobre todo por su trabajo para controlar las acciones de Fidel Castro, quien había empleado “el terror individualista desde el comienzo de su lucha contra la tiranía en las montañas”, algo que, según las propias palabras de Aguirre, “interfería con el trabajo del PSP”. “Nosotros hicimos todo lo posible —recalcó Aguirre— para que Fidel Castro abandonara esos métodos”.
Otro rastro documental de la visita a Moscú de ese representante del PSP ilustra, de forma muy clara y temprana, la esencia de la estrategia que los soviéticos escogieron para darle al castrismo una ayuda militar, ideológica, y económica, que ya estaba prácticamente decidida. Cuando Severo Aguirre solicitó al editor del periódico Pravda (miembro activo de la KGB), el respaldo a la revolución cubana de los órganos de propaganda soviéticos, la respuesta que obtuvo fue la siguiente: “Las cosas van bien, y el imperialismo americano podría usar esos artículos de Pravda como justificación para sus futuros ataques a las estructuras democráticas de Cuba. Si las cosas empiezan a deteriorarse en Cuba, entonces Pravda brindará más información y publicará sus expresiones de solidaridad”. (Centro de almacenamiento de la documentación contemporánea: Carta de Severo Aguirre al Comité Central. Marzo 1, 1959, Folio 3, Lista 50, Fichero 174, pág. 11).
En marzo de 1959 (aproximadamente) un representante del PSP, todavía hoy no identificado, se reunió con el Mariscal Vasili Sokolovsky, jefe del estado mayor del Ejército Rojo, para discutir la ayuda militar soviética al triunfante Ejército Rebelde. Antes de esa importante reunión, el representante del PSP escribió un informe titulado: “Las fuerzas armadas tradicionales y actuales en Cuba” (Centro de almacenamiento de la documentación contemporánea. Archivo del secretariado del Comité Central: Reporte anónimo de un representante del PSP, con sumario de la reunión sobre este tema entre el autor del reporte y el Mariscal Sokolovsky. Sin fecha, por el contexto, alrededor del primero de marzo de 1959. Folio 5, lista 50, fichero 174, págs. 35-52).
Ese encuentro tuvo dos consecuencias importantes, la primera: dio lugar a la resolución del Presidium del Comité Central de enviar a Cuba diez asesores hispano-soviéticos, con la misión de reorganizar y convertir al Ejército Rebelde en una fuerza militar moderna. Uno de eso asesores, que llegó a La Habana en marzo de 1960, y fue conocido por los cubanos como Ángel Martínez Riosola (su verdadero nombre fue Francisco Ciutat de Miguel, y los soviéticos lo bautizaron como Pavel Pablovich Stepanov), es recordado, según las palabras del comandante Belarmino Castilla, como el hombre “que llevó a las FAR la organización y la estrategia militar modernas”. La segunda consecuencia fue la oferta, “inesperada”, del Mariscal Sokolovsky, de entrenar pilotos de combate cubanos. La fecha es, recordemos, marzo de 1959; el día cinco de ese mes, allá en La Habana, varias decenas de pilotos, fueron acusados falsamente de ser batistianos y condenados, en un segundo juicio, a penas que oscilaron entre veinte y treinta años de prisión. El castrismo necesitaba pilotos.
Un mes más tarde, en abril de 1959, Raúl Castro envió a Lázaro Peña, a Moscú, con la solicitud de asistencia soviética para las fuerzas armadas cubanas. Raúl Castro pidió la asistencia de unos cuantos comunistas españoles que fueran graduados de las academias militares del Ejército Rojo. En esa visita Lázaro Peña también hizo llegar un mensaje de Blas Roca, invitando a los soviéticos a “desarrollar relaciones económicas con Cuba, comprar azúcar cubana y abastecer al país con maquinarias agrícolas y equipamiento industrial” (Archivo del Presidente de la Federación Rusa: Boris Ponomarev al Comité Central, Abril 15, 1959, Folio 3, lista 65, fichero 874).
Esos tres contactos —bien tempranos y de alguna forma redundantes y contradictorios—, de tres miembros distintos del PSP, dos que han sido identificados (Severo Aguirre y Lázaro Peña) y uno que todavía hoy permanece bajo el anonimato, ilustran la existencia de una organización, como la del PSP, estructurada en círculos concéntrico, con un alto nivel de compartimentación y con acceso a escalones muy diferentes dentro de la jerarquía soviética. Mientras Aguirre y Peña tuvieron que contentarse con anfitriones de niveles intermedio, el misterioso enviado anónimo del Partido tuvo acceso a un Mariscal del Ejército Rojo que era, además, el jefe de su Estado Mayor.

¿Quién pudo haber sido ese enviado? Es difícil saberlo con certeza. Lo único que podemos saber, por el momento, es el grupo que requisitos que tuvo que reunir para que ambas partes, la soviética y la cubana, lo consideraran como la persona idónea para un contacto del más alto nivel y, por tanto, de la más alta discreción y confiabilidad. Tiene que haber sido un cubano, de preferencia que hablara ruso, que tuviera conocimientos militares, que fuera bien conocido y confiable para los estrictos estándares de seguridad de la KGB y de la inteligencia militar soviética. Al mismo tiempo, tiene que haber sido alguien con acceso a la más alta jerarquía del movimiento castrista, y depositario de un respeto y una confianza que Fidel Castro sólo tuvo para con unos pocos miembros del PSP.
Flavio Bravo encaja perfectamente con ese perfil. Fue el hombre que se ganó la confianza de Fidel Castro desde sus años en la Universidad de La Habana. Fue el comunista que avaló la membrecía Raúl Castro en el PSP. Estuvo exiliado en Moscú desde 1952, hablaba ruso y se sabe que estudió en alguna de las academias militares soviéticas. En 1961 fue jefe de operaciones del Estado Mayor General de las FAR, cargo que conservó hasta después de la Crisis de Octubre. En 1963 fue jefe (operativo y real) de la misión cubana en Argelia; y a partir de ahí su nombre aparece vinculado, de una forma u otra, a casi todas las operaciones “cubanas” en África, incluida la reunión con Agostino Neto en mayo de 1975, en Brazzaville.
Hay dos detalles que apuntan hacia la posibilidad de que haya sido Flavio Bravo quien se entrevisto con el Mariscal Sokolovsky. El primero es que a la llegada de Ángel Martínez Riosola a La Habana fue precisamente “Julio” (nombre de guerra de Flavio) el contacto que lo estaba esperando en el aeropuerto “José Martí” y lo guió con todos los cuidados y rigores de una operación de inteligencia. Al mismo tiempo, el Mariscal Sokolovsky es el creador de la famosa doctrina que lleva su nombre y que tiene, entre uno de sus puntos principales, el carácter decisivo, sobre el destino de una guerra general, de la fase más temprana de la misma. Esa doctrina, que puede ser traducida al cubano con el famoso dicho de que “el que da primero da doble”, fue esencial en el diseño de la estrategia nuclear soviética y se convirtió, por tanto, en una de las razones del emplazamiento de misiles nucleares en Cuba. Cuando eso sucedió, casualmente, el jefe de operaciones del Estado Mayor General de las FAR eraun hombre en el que los soviéticos siempre tuvieron una gran confianza.
(Continuará…)

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