miércoles, agosto 23, 2006

PROPIO DE SABIOS

Nota del Blogguista


Este artículo no se parece a los artículos que frecuentemente escribe Juan González Febles.

Es cierto lo que dice cuando afirma: ¨Incluso parece que algunos celosos guardianes de la democracia no aciertan a viabilizar la entrega de la ayuda que debe llegar a opositores, disidentes y periodistas. ¨ , pero no es así cuando agrega: ¨ Las leyes y limitaciones del embargo o las limitaciones de remesas y viajes prestan de esta forma otro servicio a la dictadura, torpeza aparte.¨.



No son las leyes y limitaciones del Embargo las causantes de esa situación: en unas ocasiones las causantes son las miserias human
as, dentro y fuera de Cuba, y en otras ocasiones, al trabajo de los infiltrados, también dentro y fuera de Cuba, de la Seguridad del Estado en posiciones que les permite manejar esos fondos de manera tal que promuevan dentro de la oposición y disidencia: disgustos, divisiones, dudas, deserciones y su desacreditación ante el pueblo.

No es de descaratar que las miserias humanas y ese trabajo de zapa de la Seguridad Cubana dentro de la disidencia y la oposición vayan unidas.


La solución no es la que plantea Juan González Febles:

¨ Rectificar es propio de sabios. Es hora de estudiar con detenimiento las regulaciones que posibilitan que sólo nos lleguen excelentes vistas a color de bien surtidos almacenes. Mejor sería recibir las fotografías de estas naves vacías. Mucho mejor la satisfacción legítima de que ya los suministros de tales naves alcanzaron su destino natural. Todo esto, por supuesto, sin odiosas exclusiones dictadas por agendas políticas de ocasión.

Mantener las limitaciones sobre el envío de remesas y viajes, hoy sirve el propósito de la dictadura. Mañana traerá su afán y las medidas que este afán requiera. Rectificar es propio de sabios: ¡Manos a la obra! ¨

La solución no es levantar de manera general las limitaciones sobre el envio de remesas y viajes, sino hacer las adecuaciones necesarias para que las mismas lleguen íntegras a los legítimos, particulares e individuales destinatarios. Levantar de manera general esas limitaciones sí sería servir a la dictadura.

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Propio de sabios


Por Juan González Febles




LA HABANA, Cuba - Agosto (www.cubanet.org) - La sabiduría antigua afirmó desde tiempos inmemoriales que "errar es humano y rectificar, de sabios". Parece que llegó el momento de revalorizar de forma crítica algunas medidas que deben ser modificadas o reinterpretadas. Las dos medidas que requieren un más rápido reexamen son las que regulan los envíos de remesas y los viajes de Cuba a los Estados Unidos y viceversa.

Cuando se promulgaron, una de las fuentes principales de ingreso para la dictadura militar de Fidel Castro, la constituyeron las remesas desde el extranjero. Las que provenían de Estados Unidos, obviamente tuvieron y tendrán mayor peso. Los viajes y visitas familiares entre los dos países, cayeron bajo la lógica del mismo razonamiento.

La aparición en la escena política internacional de la Venezuela de Chávez dio un giro dramático a esta situación. Los subsidios de Chávez (más generosos que los de la URSS en su momento) al régimen de Fidel Castro han revertido de forma total la ecuación.

Hoy la dictadura puede darse el lujo de prescindir de las remesas. No siente la mayor inquietud porque el cubano de a pie en ambas orillas, sufra la separación familiar. A fin de cuentas, se trata de un engendro que creó la propia dictadura cuando lo consideró necesario.

La situación en Cuba es nueva. Para decirlo de alguna forma, el esfuerzo represivo de mayor envergadura dejó de estar dirigido contra la oposición interna o contra la prensa libre cubana. Hoy el peso represivo de una dictadura casi perfecta está orientado contra el pueblo de la Isla. Una guerra contra todo el pueblo está en pleno desarrollo y constante evolución desde el año 2002.

El éxito de la dictadura en este empeño consiste en privar al pueblo de los esenciales mínimos para una supervivencia decorosa. Otro aspecto de vital importancia es el reforzamiento del bloqueo informativo. Mantener las limitaciones al envío de remesas se convierte en un boomerang que asiste a la dictadura en su enfrentamiento con el pueblo, entre otras cosas.
En otro momento defendí la suspensión de remesas y las limitaciones a los viajes, hoy las circunstancias me obligan a reconsiderar esta situación. En relación con las visitas familiares, las opciones son idénticas. Romper o dificultar los contactos familiares entre la gente de a pie, en este momento es contraproducente.

Las leyes se conciben para los hombres y para su mejoramiento. Pueden ser modificadas y reajustadas. Cortar los viajes de alabarderos académicos, científicos, deportivos y de todo tipo entre ambas orillas es obligatorio. Impedir la entrada en los Estados Unidos de progromistas y pandilleros comprometidos con delaciones y mítines de repudio es loable, útil y necesario.

Algo que aportaría mucho sería limitar o suspender los viajes del seudo pastor Walker. Este agente castrista viaja con la frecuencia que quiere a la Isla. Cada uno de sus viajes se traduce en una importante contribución en recursos de todo tipo a la dictadura. Pero a Lucius Walker no se le imponen obstáculos. Ese triste contraste de limitar a cubanos de a pie en ambas orillas es nocivo e inadecuado.

Incluso parece que algunos celosos guardianes de la democracia no aciertan a viabilizar la entrega de la ayuda que debe llegar a opositores, disidentes y periodistas. Las leyes y limitaciones del embargo o las limitaciones de remesas y viajes prestan de esta forma otro servicio a la dictadura, torpeza aparte.

La prensa independiente de Cuba se ha recuperado de forma admirable del zarpazo represivo de 2003. El nivel profesional alcanzado por algunos de sus miembros no desmerece el nivel promedio en los medios de prensa hispanos en Estados Unidos. El trabajo periodístico que se realiza desde la Isla está por encima de muchos productos tomados y reciclados de la página cubanet.org, (y posteriormente muy bien pagados) o de meros plagios realizados sobre el tema cubano tomando como fuente a esta misma página, con mayor o menor elaboración.

Pues bien, las limitaciones y regulaciones dirigidas contra el régimen de Fidel Castro limitan que se privilegie con un salario justo a periodistas independientes que realizan su trabajo en las condiciones de riesgo impuestas por la dictadura militar.

Rectificar es propio de sabios. Es hora de estudiar con detenimiento las regulaciones que posibilitan que sólo nos lleguen excelentes vistas a color de bien surtidos almacenes. Mejor sería recibir las fotografías de estas naves vacías. Mucho mejor la satisfacción legítima de que ya los suministros de tales naves alcanzaron su destino natural. Todo esto, por supuesto, sin odiosas exclusiones dictadas por agendas políticas de ocasión.

Mantener las limitaciones sobre el envío de remesas y viajes, hoy sirve el propósito de la dictadura. Mañana traerá su afán y las medidas que este afán requiera. Rectificar es propio de sabios: ¡Manos a la obra!
jgonzafeb@yahoo.com