domingo, marzo 14, 2010

SOBRE EL ASESINATO EN CUBA DE ORLANDO ZAPATA TAMAYO Y LAS DECLARACIONES DEL CANCILLER BRUNO: ¿TÚ TAMBIÉN, BRUNUS?

¿TÚ TAMBIÉN, BRUNUS?


Por Julio Antonio Aleaga Pesant

Periodista independiente.
aleagapesant@yahoo.es

El Vedado, La Habana, 11 de marzo de 2010, (PD) Juan Pérez, en el poblado habanero de Bauta, no comprende las razones de José “Pepe” Hernández, Presidente de la Fundación Nacional Cubano-Americana para atacar de manera tan furibunda a Pedro Roig, Director de Radio y Televisión Martí.

Juan no conoce a Pedro, pero como miles de cubanos, tuvo la oportunidad de seguir las exequias de Orlando Zapata Tamayo en Banes, a través de la emisora. No sabe de donde “Pepe” saca las “fidedignas” cifras de audiencia de la emisora, ni por qué confunde al grupillo disidente que intentó, no se sabe con cual intención, boicotear Radio Martí, con la inmensa mayoría de los periodistas independientes, blogueros, personalidades políticas, cívicas y religiosas.

Ante los micrófonos de Radio Martí, comparecieron en dos meses del año 2010, Doña Reina Tamayo, Yoani Sánchez, Juan González Febles, Elizardo Sánchez, Luis Cino, Iosvani Anzardo, Dagoberto Valdez, Silvio Benítez…Esos nombres dan un amplio espectro de la sociedad cubana en lo ideológico y territorial.

La discusión, según parece, proviene de la intención de controlar los fondos que el gobierno de los Estados Unidos destina a la promoción de la democracia en Cuba. Sobre el tema se habla de un equipo de presión congresional nombrado Grupo Multidisciplinario y formado por “académicos” cubano- americanos y otras yerbas afines.

Realmente, una presencia más modesta tuvo el canciller de la tiranía, Bruno Rodríguez de la Parrilla. Quizás el último de los que pensamos interviniera en la campaña mediática desatada tras la tragedia de los presos políticos y en especial la de Orlando Zapata Tamayo.

Luego de las lamentables intervenciones de Enrique Ubieta, Fidel Castro y Gladys Rubio en los medios de comunicación, en su afán de vituperar a Zapata Tamayo, Bruno fue enviado a Ginebra al segmento de alto nivel del Consejo de Derechos Humanos, con el discurso Una Nueva escalada subversiva ha sido lanzada contra Cuba.

Llama la atención lo subjetivo del título. ¿Hay subversión en la isla? Nadie en sus sanos cabales puede referir turbulencia o insurrección en Cuba. Los demócratas cubanos apuntan con rigor a la gobernabilidad y gradualidad para alcanzar sus fines. Cuando más, un grupo de indignados ciudadanos clama contra el asesinato premeditado de un demócrata por una monarquía dinástica y conservadora.

La intervención en Suiza de Bruno tiene más relación con el escenario externo que con el interno, de donde mal parados salieron Ubieta, Castro y Rubio en sus intentos. Pretende en esa excelsa reunión de dictadores y tiranías que es el Consejo, aupar el consenso para detener la indignación de las democracias mundiales ante el crimen.

Con los representantes de Ahmadinehjad, Kadafi o Mugabe, es probable que arme un frente común para denunciar la timidez democrática. Hablará seguramente de unos 5 577 cubanos muertos o heridos. Pero ni una palabra de los mas de 2 000 muertos en las guerras africanas. De los mutilados en esas guerras no se tienen cifras. De los muertos africanos por la presencia militar cubana, tampoco hay guarismos.

Interesante saber el numero de 20 000 muertos enarbolado en el discurso oficial. ¿A qué se refiere Bruno?

Se une el impostor a las falacias contra Zapata Tamayo e incorpora ideas de su propia cosecha. Como cuando lo señala como reclutado en prisión (¿para qué?) o cuando refiere la escalada subversiva con amplia cobertura mediática. Por supuesto, ni una palabra sobre la firma de los Pactos Civiles y Políticos, la visita del Relator para la Tortura o de un Comisionado de la Cruz Roja Internacional. De eso no habla el indigno canciller.

Tras los ideales de independencia y libertad enarbolados por Bruno en Ginebra existe realmente la intención de mantener sometida a la nación al mandato de la monarquía de los Castro. Independencia para someter al soberano. Libertad para expoliar al ciudadano.

“¿Tú también, Brutus?”, dijo César al verse apuñaleado por su protegido. Tu también, Brunus, dice la opinión pública mundial ante el alarde de genuflexión del canciller.

aleagapesant@yahoo.es