lunes, agosto 28, 2006

FIDEL CASTRO Y LA " BANDA DE LOS CUATRO "

Tomado de Cuba Encuentro.com



Castro y la 'banda de los cuatro'


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Lecciones para 'talibanes': En la China post-Mao el sucesor designado fulminó a los más cercanos colaboradores del dictador.
Miguel Rivero, Lisboa
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lunes 28 de agosto de 2006 6:00:00


Algunos aseguran que la transición en Cuba ya ha comenzado, tras la lectura de la "Proclama" en la cual el Comandante en Jefe, Fidel Castro, cedió los poderes a su hermano Raúl. Otros afirman, casi de manera categórica, que ya está en marcha "el proceso de la sucesión".

Sin embargo, mientras Castro se encuentre vivo y conserve (aunque sean reducidas) sus facultades mentales, Raúl no podrá ejercer esos poderes a plenitud.

Los optimistas olvidan en sus pronósticos una frase clave en la delegación de poderes. La de que todo es "con carácter provisional". Además, la misma proclama impone límites y condiciones al pleno ejercicio del gobierno por parte de Raúl, pues en varios sectores tiene que hacerlo en coordinación con otros miembros del Buró Político, también provisionales, pero con tareas específicas delegadas por el Máximo Líder.

Sin capacidad ejecutiva

Resulta muy difícil imaginar a Fidel Castro completamente al margen de los asuntos de Estado y de gobierno mientras (según todo parece indicar) se recupera de la intervención quirúrgica.

Su hermano Raúl sabe perfectamente que Fidel, a través de su secretario personal Carlos Valenciaga, puede pedir cuentas directamente, por ejemplo, al presidente del Banco Central, Francisco Soberón, y si ha sido adoptada alguna decisión con la cual él no está de acuerdo, dar la orden de que se rectifique de inmediato. En el supuesto de que el asunto hubiese sido consultado antes con Raúl, éste último quedaría en una posición bastante incómoda.

O sea, mientras no se produzca la plena desaparición física de Fidel Castro, su hermano Raúl estará a cargo de los asuntos corrientes del Estado y del gobierno, pero sin capacidad de adoptar nuevas medidas.

El peligro en estos momentos es que Fidel Castro continúe perdiendo gradualmente sus facultades físicas y mentales y entonces se imponga el factor cercanía, el acceso directo al Jefe, como un elemento para transmitir nuevas órdenes y orientaciones. ¿Soportará Raúl esta situación? Es muy probable que tenga que hacerlo, pero salvaguardando sus huestes, para el momento de la desaparición física del hermano.

Ya después de leída la Proclama por Valenciaga, se dio el primer caso en la siguiente Mesa Redonda, cuando Randy Alonso dijo que había estado conversando con Fidel y transmitió al pueblo cubano nuevos mensajes acerca de su estado de salud y otros asuntos.

Las iniciativas y temas de las mesas redondas dependen tanto de Fidel Castro que los periodistas saben perfectamente que en muchas ocasiones se demora el cierre del diario Granma porque todavía el Comandante en Jefe (o en algunos casos puede ser Randy Alonso) no ha llamado por teléfono para comunicar cuál será el próximo tópico a discusión en ese foro televisivo. Como es conocido, esto siempre ocupa un recuadro en la primera página.

Un ejemplo en la historia

Esta situación crea un grave problema para el futuro de Cuba. Si la enfermedad de Castro se prolonga y va perdiendo gradualmente sus facultades físicas y mentales se puede repetir el episodio que en China dio lugar al surgimiento de la tristemente célebre "banda de los cuatro".

El presidente Mao Zedong, ya postrado y apenas balbuceante, llegó a comunicar sus orientaciones a través de su tercera esposa, Jiang Qing, quien después de la Revolución Cultural ascendió vertiginosamente al Buró Político del Partido Comunista de China (PCCh) en el X Congreso, en agosto de 1973.

Junto a la entonces viuda de Mao, también llegaron a la máxima instancia del PCCh sus más cercanos colaboradores: Yao Wenyuan y Zhang Chunqiao, que habían dirigido la Revolución Cultural desde Shanghai, y un joven casi desconocido, Wang Hongwen, quien pasó a ocupar una de las vicepresidencias del partido, tras Mao y Zhou Enlai.

No intento trazar aquí una similitud entre lo ocurrido en China y lo que pueda producirse en Cuba. Es cierto que hay grandes diferencias entre una y otra situación. Pero conviene no olvidar estas lecciones de la historia.

Lo cierto es que Fidel Castro, con su temperamento caótico y caprichoso, se ha rodeado de un grupo de jóvenes que hacen lo indecible por imitarlo y agradarle. El ministro de Relaciones Exteriores, Felipe Pérez Roque, es uno de esos ejemplos y no es casual que su nombre aparezca en la Proclama, precisamente en la comisión para administrar los fondos especiales para los planes que anima y dirige el Comandante en Jefe.

Chivos expiatorios

En el caso chino, a pesar del poder que "los cuatro" habían acumulado, la muerte de Mao —el 9 de septiembre de 1976— dejó la autoridad máxima en las manos de Hua Guofeng, el sucesor nombrado por él poco antes de morir (Zhou Enlai había fallecido antes).

Consciente de que una lucha por el poder con Jiang Qing y sus seguidores iba a ser inevitable, Hua Guofeng aprovechó su autoridad para ordenar el arresto de los cuatro. Juzgados y condenados, fueron convertidos en el chivo expiatorio de todos los males de la Revolución Cultural. La caída de la "banda de los cuatro" marcó el final de una década de fervor revolucionario y de luchas por el poder que afectaron profundamente a la sociedad china del momento.

La viuda de Mao se suicidó en la cárcel, en1 991. Wang Hongwen murió de cáncer en Beijing en 1992, cuando cumplía una pena de cadena perpetua; Zhang Chunqiao murió también de cáncer en abril de 2005, tras 18 años en prisión. Yao Wenyuan fue el último miembro de la llamada "banda de los cuatro" que murió, a los 74 años, el 23 de diciembre de 2005; pero la agencia oficial Xinhua lo informó el pasado 6 de enero.

Yao había sido condenado a prisión en 1981 por sus crímenes y había sido liberado en 1996. Desde entonces vivía en Shanghai, su ciudad natal, estudiando historia. Su muerte se debió a complicaciones ocasionadas por la diabetes.

Llegado el momento, al sucesor designado en Cuba, Raúl Castro, probablemente no le temblará la mano para borrar del mapa a los jóvenes talibanes, en caso de que estos consiguieran organizarse como una alternativa de poder. Sería oportuno que el 'clan de jóvenes entusiastas' tomara nota de la historia.

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http://www.spartacus.schoolnet.co.uk/CHINAjiang.htm


Jiang Qing, the daughter of a carpenter, was born in Zhucheng, China, in 1914. After being educated at Qingdao University she worked as a stage and film actress in Shanghai.

In 1936 Jiang Qing joined the Chinese Communist Party. Soon afterwards she met Mao Zedong and she became his third wife in 1939. After the establishment of the People's Republic of China in 1949, Jiang Qing worked in the Ministry of Culture.

Jiang Qing emerged as a serious political figure in China during the Cultural Revolution when she criticizedparty leaders such as Liu Shaoqi, who favoured the introduction of piecework, greater wage differentials and measures that sought to undermine collective farms and factories.

During this period Mao Zedong galvanized students and young workers as his Red Guards to attack revisionists in the party. Mao told them the revolution was in danger and that they must do all they could to stop the emergence of a privileged class in China. He argued this is what had happened in the Soviet Union under Joseph Stalin and Nikita Khrushchev.

The Cultural Revolution came to an end when Liu Shaoqi resigned from all his posts on 13th October 1968. Lin Biao now became Mao's designated successor. Mao now gave his support to the Gang of Four: Jiang Qing, Wang Hongwen, Yao Wenyuan and Zhange Chungqiao. These four radicals occupied powerful positions in the Politburo after the Tenth Party Congress of 1973.

After the death of Mao in 1976 the power of the Gang of Four declined dramatically. In 1980 they were found guilty of plotting against the state. Jiang Qing and Zhange Chungqiao, who were considered to be the leaders, were sentenced to death (later commuted to life imprisonment).

Jiang Qing died in 1991. Later the government claimed that she had committed suicide.