Alberto Roteta Dorado sobre Cuba: NO ES TIEMPO DE DIÁLOGO CON AQUELLOS PARA LOS QUE JAMÁS HA EXISTIDO EL DIÁLOGO
**********
Solo con el exterminio de toda manifestación de carácter comunista podrá haber libertad de pensamiento y de expresión, libre creación artística y ausencia de represión y marginación.
(Comentario a propósito de los últimos sucesos ocurridos en Cuba.)
***********
Por Doctor Alberto Roteta Dorado.-
1 de diciembre de 2020
(Imagen sin comentario)
Santa Cruz de Tenerife. España.- El silencio nos hace cómplices, toda vez que estar ajenos al sufrimiento y al dolor de aquellos que con valentía han sido capaces de unirse y manifestarse nos hace copartícipes de una apatía de la que hay que salir. Es por esto que quiero compartir algunas ideas con mis lectores, tratando de no ser reiterativo, y por encima de todas las cosas, ser consecuente conmigo.
No voy a cuestionar desde estas breves líneas lo que es o no es el arte. De eso deben encargarse aquellos entendidos en estos conceptos acerca de la creación, las nuevas técnicas expresivas, el talento innato, la necesidad o no del paso por la academia, entre otras tantas teorizaciones al respecto; aunque yo tengo muy bien establecidos mis preceptos en relación al arte y a lo que significa ser artista.
De cualquier modo, los últimos sucesos ocurridos en La Habana trascienden al arte en sí, aunque en ellos se han involucrados artistas de diversas manifestaciones. Los muchachos que supieron asumir con decoro su misión, de una u otra forma, están vinculados al arte, ya sea de manera profesional o no; pero hay un hecho concreto: la intelectualidad se alza en gesto de heroicidad y valentía.
Este grupo de jóvenes no son marginados, no son improvisados, no han sido manipulados, como pretende exponer el oficialismo que siempre ve al enemigo imperial por doquier junto a un amplio despliegue de mercenarios imaginarios, según ya lo han expresado reiteradamente y lo han reafirmado por estos días.
La polémica actual en torno al Movimiento San Isidro solo ha sido el detonante para esa toma de conciencia necesaria de una parte de la intelectualidad de la isla. Téngase en cuenta que los cientos de jóvenes que se plantaron en las cercanías del Ministerio del Cultura de La Habana es solo una efímera parte de un gran iceberg.
La realidad es bien distinta y eso todos lo saben. Solo una exigua minoría salió a las calles; pero miles desde el silencio piensan como estos firmes defensores de la libertad de pensamiento y de expresión en el arte, algo que no debe quedarse limitado al arte, sino que deberá trascender a la historia, la ciencia, la filosofía, la política, la economía, en fin, a todo el amplio contexto de la sociedad cubana que ha permanecido por más de sesenta años regida por los obsoletos dogmas del marxismo-leninismo, devenido en idolatría castrista en su advocación caribeña.
Es hora de detener para siempre el adoctrinamiento comunista. Es imperdonable que se manipule el pensamiento de todos desde etapas tan tempranas de la vida de niños y jóvenes. Imposible seguir admitiendo que los infelices niños repitan la sacrílega frase de: ¡pioneros por el comunismo!, y lo peor, que por respuestas se vean obligados a responder que han de ser como el Che, un reconocido asesino, xenófobo, homófono, y para colmo "cochino". Este presente tiene que ser necesariamente transformado, por cuanto, la teoría guevariana del hombre nuevo solo ha originado la degradación de la sociedad cubana.
(Mucho menos se dialaoga con la marioneta de un dictador. Fotos, imágenes y comentario añadidos por el bloguista)
Resulta risible que se siga exigiendo en las universidades enfoques marxistas para cualquier tipo de investigación o exposición estudiantil o de post-grado. La filosofía marxista es una ínfima parte de una inmensidad que los cubanos perdieron la oportunidad de apreciar, toda vez que la imposición de una forma única de filosofía oficial, la marxista, impidió que pudieran conocer el pensamiento de los grandes, de los verdaderos filósofos del mundo, excepto a través de la apreciación valorativa que el alemán que jamás trabajó hizo de sus contemporáneos.
Tiempo también de exigir que se presente el verdadero rostro de la historia nacional y universal exponiendo junto a las injusticias del fascismo las imborrables huellas del comunismo, que según serias investigaciones superó con creces las pérdidas humanas si se le compara con el fascismo.
Sería interminable hacer referencia a todo lo que se debe exigir y no dialogar. No es tiempo de diálogo con aquellos para los que jamás ha existido el diálogo. Recordemos que cuando el dictador Fidel Castro se reunió con los intelectuales, recién iniciado su terrorista gobierno, lejos de conducirlos a través de un fraterno diálogo, los amenazó hasta el cansancio. De ahí que el dramaturgo Virgilio Piñera, figura despreciada y marginada por los comunistas cubanos, expresara que tenía mucho miedo.
¿Miedo de qué y a qué? Ahora tenemos la respuesta. Los manipuladores del pensamiento colectivo de la nación son capaces de todo, y todo significa que están dispuestos a seguir marginando, humillando, maltratando, censurando y aniquilando a todo aquel que no esté con la revolución, evocando la célebre frase de aquel que es el verdadero causante de todos los males de la nación cubana, esto es: "dentro de la Revolución, todo; contra la Revolución, nada”; algo que el actual presidente de Cuba, - designado y no elegido- retomó hace unos pocos meses durante las celebraciones del último congreso de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, UNEAC, y que, como todos saben no estará dispuesto a variar. Para el señor Díaz-Canel Bermúdez todo es continuidad.
Hay que ser ingenuos para creer que los líderes políticos de Cuba tendrán un diálogo con aquellos que piensan de un modo diferente a los patrones que ellos determinaron serían los correctos para todos. Ya la primera reacción fue establecer la contrapartida mediante un simulacro de acto espontáneo - allí no hay nada espontáneo-, cuando en realidad fue organizado por la Unión de Jóvenes Comunistas, el Partido Comunista, la UNEAC, la Asociación Hermanos Saíz, etc. Allí si se presentó el presidente no elegido, junto a la "continuidad". Y así seguirán actuando hasta destruir cualquier vestigio de forma diferente de pensar y de expresarse.
Ya el cordero impuso sus condiciones al supuesto diálogo. Jamás abandonará a su “revolución”, algo que fue aplaudido por aquellos que le rodearon gritando sus vulgares consignas de “pa’ lo que sea” o sus vítores a Fidel, Raúl y al propio Díaz-Canel.
Un diálogo no resuelve absolutamente nada. Se requiere un cambio radical urgente.
Solo con el exterminio de toda manifestación de carácter comunista podrá haber libertad de pensamiento y de expresión, libre creación artística y ausencia de represión y marginación.
******
Etiquetas: castrista, Castro, cuba, diálogo, Díaz Canell, Díaz-Canell, dictadura, hambre, intelectuales, jóvenes, La Habana. acto oficialista, MINCULT, MSI, parque Trillo, represión, San Isidro, tunior morales
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home